She's not good {Justin Bieber pov's}

"Yo no era Travis, era mucho peor"

El motor de Vicks se encuentra temblando debajo de mis piernas mientras rebusco el encendedor en alguno de los doscientos bolsillos que llevo encima. ¡Me cago en Dios! ¿Por qué mierda hacen los bolsillos tan jodidamente grandes? Suelto un bufido al revisar el bolsillo izquierdo sin victoria al no encontrar nuevamente el encendedor. 

  — En la camisa —  habla una voz detrás mío y giro observándola a los ojos con una ceja alzada

— ¿Uh? —  ella rodó los ojos, casi como si estuviese diciendo  "Demonios, él es un enorme imbécil" y se inclinó hacia mi, metiendo su mano izquierda en aquél bolsillo que se encontraba en la camisa, sacando por fin aquél objeto — Gracias  — contesto sin mirarla y quitandole el fuego de las manos a la par que encendía el porro con ansiedad

  — Sinceramente, eres descuidado no sé porque no te han atrapado nunca —  reflexiona detrás mío y yo suelto una risita divertida dando otra calada. Giro mi cabeza hacia atrás, aún sintiendo como el motor de Vicks resuena fuertemente debajo mío y miro hacia Kylie con diversión 

— Eso es nena — le hablo con la voz ronca y diversión — porque además de ser descuidado, soy jodidamente inteligente — guiño mi ojo con burla y luego la observo nuevamente — además, digamos que tengo la suerte de Jack Sparrow o alguna mierda como esa —  bromee carcajeándome y posteriormente, dejé salir el humo en su rostro, dejando que el olor a marihuana le inunde las fosas nasales. — Bien. ¿Recuerdas la mierda que te dije? —  Kylie bajó de mi moto a la vez que rezongaba y rodaba sus ojos 

— ¡Demonios! sí, papá lo recuerdo todo —  se quejó mientras alzaba el dedo del medio hacia mi, yo alcé mi ceja izquierda, ella la derecha — ¡Eres un dolor en el culo, solo apresúrate! —  

Y así, como había comenzado una buena tarde, ella tenía que arruinarlo. Esa maldita perra siempre tenía que arruinarlo todo con sus comentarios de mierda.  ¡Estaba haciendo mi esfuerzo! Estaba malditamente intentando ser agradable con ella, para que se sintiera en casa y la enorme perra lo hace parecer como si fuese algo sin importancia. 

  — Si te mandas una cagada, voy a sacar la mierda fuera de ti —  escupo con rabia en el momento en que todas las vibras positivas desaparecieron y guardé la bolsa en mi bolsillo, mirando hacia todos lados con el porro entre mis labios — No te conocen, recién voy a presentarte, no hagas nada estúpido— le advierto mientras la tomo fuertemente del brazo y la arrastro hasta cruzar la calle. 

  — ¿Algo estúpido como qué? —  cuestiona mientras intenta soltarse de ti. Yo me detengo en la acera una vez que cruzamos la calle y observo fijamente

— Como ser tú —  finalizo y me giro para caminar entre los callejones. 

No había nada más tranquilo que repartir drogas en el mismo barrio en el que vives. Nadie te delata, no hay polis cercas y todos se llevan jodidamente bien. Algo terrible tendría que suceder para que aquella tranquilidad se arruinara, normalmente caminaba tranquilo. Sin embargo, con Kylie siguiéndome el culo, simplemente me encontraba esperando el momento en que estallara.

  — ¿Estás esperando una jodida invitación? — escupo una vez que me doy cuenta no me está siguiendo hacia el callejón

— Tal vez, si no caminaras como si tuvieses un petardo en el culo... —  murmuró mientras alzaba sus cejas con burla — ¡Oh, vamos Justin! Deja el puto mal humor, ya —  se quejó y trotó hasta llegar a mi lado, me dio un ligero empujón — Vamos a vender un poco de mierda —

Rodé los ojos y caminé, simplemente con ella a veces no se podía más.

No pasaron muchos minutos antes de que Iozev se hiciera presente. Aquél enorme gordo de mierda, acompañado de dos perras calientes, caminó por aquellas calles creyéndose el dueño del lugar. Sin embargo él no lo era, yo soy el maldito dueño. A sí que, simplemente recosté mi espalda en una pared mientras fumaba de mi porro, conociéndoselo posteriormente a Kylie, dando a entender que se encuentra conmigo.