Estoy destinada a ser "La Otra"

Todo empezó con un beso

Y bueno, digamos que todo partió con mi primer beso.
Aww desde el principio que les ponen los cuernos conmigo.

Mi primer beso fue en una fiesta. No diré que fue mi primera fiesta, pero fue la primera fiesta en la que bebí alcohol y creo que nunca me he vuelto a emborrachar de esa manera. Si me hubieran sacado sangre esa noche hubiera salido un shot de tequila, se los aseguro. Creo que me caí 2 veces, y fue un milagro de que haya sido lejos de la piscina, uhm bueno tal vez eso tuvo que ver con el hecho de que mis amigos estuvieron ahí para evitarlo. Lo que no pudieron evitar fue que me haya ido a lo oscurito con un chico que se encontraba en una relación. ¡Joder Maya, de nuevo con los chicos comprometidos! (Así como "Damn Daniel" ah).

El nombre de este chico era... Uhm... Esto es vergonzoso, debería acordarme.
¡ERIC! Ese era su nombre. Creo.

Digamos que se llama Eric, sí como el novio de la sirenita. Así que su novia se llamará Ariel, porque se me da la gana y porque de esa si que no me acuerdo del nombre, me valió verga en el momento y hasta el día de hoy me vale verga la existencia de la chica.

Vale entonces tenemos una Maya extremadamente borracha y un solitario Eric, en una fiesta sin su querida Ariel. Pues Maya quería ser solidaria y buena persona así que fue con Eric, a hacerle compañía sin ninguna intención. Estamos hablando de Maya en su versión de 15 años, es una santa, nunca ha besado a ningún chico, no mata ni una mosca y es su primera borrachera.

–¿Qué sucede, Eric? ¿Porqué esa carita de perrito mojado?

–Estoy terriblemente aburrido y solo.

YO FUI TAN SOLIDARIA QUE LO AYUDÉ CON SU PROBLEMA. No soy una zorra, soy una mujer solidaria, desde los comienzos.

Recuerdo que pasaron un par de minutos, y mientras nos besábamos recuerdo ver una luz que se encendió y yo me separé sin culpa alguna y me reí al respecto.

Creo que podemos llegar a la conclusión de que nunca hay que beber hasta el punto de que eres capaz de dejar de besar a un chico guapo solo por que quieres reírte de una luz encendida.