Parte 15

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Ese día, era un jueves, empezaba a ser normal, amaneció, la alarma de Marinette sonó, ella se levanto al escuchar, se despertó tranquila, se peino con calma, bajo a desayunar, sus padres le dieron su desayuno, se sentó en la mesa, pero no podía comer, sin pensar en lo que iba a ser hoy, vio el reloj, se le hacia tarde, aunque todavía tiempo, para caminar hasta la escuela. Se despidió muy feliz de sus padres, y se encamino a la escuela, iba caminando por las calles de París, siempre echando un vistazo, para ver si todo seguía en calma, voltear a ver la ciudad, se ha vuelto costumbre, en cualquier momento, un akumatizado, podía aparecer.

-Debo hablar, con el, Adrien, debo hablar contigo- se decía en su cabeza- te amo, te quiero, me colocas nerviosa, Adrien, Adrien,Adrien, -pensaba.

Entonces llego al colegio, temprano, -que raro, ya el día no es normal- se sentó, Adrien llego con una hoja en la mano, su sonrisas se cruzaron, fue casi inevitable, solo al verlo, empezó a temblar en su asiento, no quería articular nada, por que sabia que su palabras iba hacer entre cortadas, así que trago saliva,Adrien se encontraba nervioso, con su carta de confesión.A la cuarta hora, entre la nueve y cincuenta cinco e las once y diez para ser mas especifico, tenia una hora libre.

-Esa es la hora- pensaban ellos.

Paso la segunda hora, Adrien le paso una nota a Marinette.

"Nos vemos en los casilleros, a la cuarta hora" decía este papel. Marinette casi explotaba de los nervios y la impaciencia, lo miro,ella, le respondió asintiendo con la cabeza.

-¿que tiene tu y Adrien? ¿eh?-pregunta Alya

-E!-na-na-da, ¿tener?, ¿que?!!!, ¿a que te refieres?, no-o ni-ningún secreto... ¿mira la profesora?!!- señalo a ella y se hundió en la silla.

Al finalizar la hora era casi imposible, no volar entre sus pensamientos, valía soñar, las horas pasaban una eternidad, antes de iniciar la tercera hora, Nath, se acerco a ella, y le dio un papel, de color azul.

-Es una carta para ti-Dijo Nath.

Adrien volteo, a ver, con una cara molesto, cuando vio que Mari, lo miraba, volteo, no quería que lo viera así, no iba admitir que estaba celoso de su compañero Nathaniel, sin razón. La carta a abrirla, tenia un hermoso dibujo de un rosa, y encima con marcador negro, tenia el escrito:

"Marinette:

En el momento en que te vi, sin alguna razón, me enamore de ti, tu forma, decidida de ser, tu sonrisa, tu forma de ser, es algo que no había visto nunca, soy muy tímido al hablar, pero por fin e juntado las letras junto el valor, para contarte esto.

Marinette, tu nombre único como tu, he hecho varios retratos sobre ti, pero nunca he llegado a comparar tu belleza, tus hermoso ojos azules, están llenos de decisión y secretos, ¿que esconden tras aquellos luceros?, lo admito, soy culpable de retratar tu belleza, pero nunca he visto algo parecido, eres tan buena, siempre dispuesta a ayudar a los demás, estas siempre tan segura de ti misma, bueno lo mio no es escribir, es dibujar, pero, si tengo que dibujar un corazón, para señalar cuando te amo, lo dibujaría gigantesco, con un rojo intenso; solo piensa, piensa, y dime, si me das la oportunidad, de enamorarte perdidamente de mi, yo quiero que seas feliz, mas que todo junto a mi, claro

Piénsalo, Nath"

Marinette, no sabia que responder, era hermoso, volvió a ver los ojos de turquesa oscuro, que tenia Nath, estaba su rostro muy rojo, se quedo paralizado, solo miraba a Adrien, su rostro, que no entendía lo que sucedía lo que pasaba.

-Nathaniel yo....-

-Solo piénsalo, no me digas ahorita.- dijo Nath, interrumpiéndola.

Cuando comenzó la cuarta hora, Adrien se apuro a llegar a los casilleros, mientras que Marinette, iba a paso lento, por los pasillos, leyendo el texto de Nath, casi se cae por las escaleras.

Amor Entre MáscarasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora