Yandere

Remeber

Frente a mí.
Natallie y Maud.
Ese par de idiotas no lograría sobrevivir ni siquiera con un milagro, Natallie era al contrincante fuerte emocionalmente, pero, como se ha visto, perdió puntos.
Maud estaba en una posición en la que no sabía por qué estaba ahí, Dante apenas la ubicaba ¿Qué clase de mierda era esa?, supongo que hay gente realmente dañada.
Todas estábamos quietas, mirándonos las unas a las otras, todas, llevábamos guantes, la vez de Sue me había arriesgado como nunca, Sumiré estaba casi igual que yo y las demás.... Supuse que era su primera vez.
Natallie lanzó una patada a mi cara, que por suerte, pude esquivar.
La muy zorra iba a karate.
-¿Crees que con eso me vas a ganar, zorra de mierda?- le dije con desprecio y me eché a reír, realmente me hacía gracia, en verdad esta chica era muy idiota cuando quería.
Un puñetazo.
Esquivado otra vez.
Un rodillazo.
Me dio en el estómago, ella sonrió triunfante. Desenfundé la daga, estaba jugando con fuego.
Ella volvió a lanzar una patada, esta vez la pude detener metiendo la daga en lo más profundo de su pie.
Sin embargo, ¿Que hacíamos aquí?
Natallie nos había citado, tenía nuestros números.
"La batalla final"
Si, claro.
Por lo mientras, ella soltó un gemido de dolor, saqué la daga, ahora era yo quien la miraba con una sonrisa. Intentó lanzar un puñetazo, me dio en el ojo.
¿Conocen esa frase de "Ojo por ojo, diente por diente" ?
No está demás decir que lo apliqué.
Apuñalé su ojo, para luego tener el placer y el horror de sacárselo con la mano. De nuevo, gritó mientras se desangraba.
-Vaya rival que tenemos aquí- dije, aún con desprecio.
Esto era excesivamente fácil, para mi gusto. 
Le di un par de patadas y la tumbe en el suelo.
Para este momento ella daba verdaderos gritos de dolor, le tapé la boca con la mano, nos descubrirían. Mientras sus gritos se ahogaban en mi mano, pude apuñalarla en el estómago, joder con lo que me encantaba desmembrarlas, pero esta zorra era de calibre, no podía dejar que su sucia sangre me ensuciara más. La apuñalé en el cuello, una y otra y otra vez, mientras contenía las ganas de reír, de verdad lo disfrutaba.
Casi le costó la cabeza.
Por su jodida osadía, tuvo una muerte relativamente rápida.
-Eso te pasa por hacerme daño- le dije al cadavér.
Mire hacia atrás y tanto Sumiré  como Maud me miraban asustadas. Deje que Maud escapara en la oscuridad, después de todo Sumiré la había golpeado bastante, basta con decir que apenas y podía caminar. Sumiré sólo me miró
-¿Tanto daño te ha hecho?- me preguntó seria.
-La pregunta sería más bien para ti- le dije
Pude ver sus ojos hinchados de tanto llorar, supuse que nos había escuchado tanto a Dante como a mí.
-Sumiré, por más zorra que seas y que hayas sido conmigo te pido que te escondas.
-¿Y ver cómo te llevas Dante? No seas ridícula Amelia, sabemos que eso no va a pasar.
-Esta pasando Sumiré
-No es verdad
-No habrías llorado de no ser así
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-¿Qué pasó con Sumiré?
-No lo recuerdo mucho después de eso
-¿Podría decirme lo que recuerda?
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Todo es borroso y confuso
Sumiré en  él barandal de la azotea, una figura amenazándola.
El sonido de las sirenas de policía acercándose al colegio....
Todo sigue borroso