Escucho el click del cronómetro que tiene la Generala, le sonrio a Simón y salgo disparada sobre mis patines.
Patino lo mas rapido que puedo y entrego todos los pedidos. No quiero que la Generala se enoje más de lo que ya está. Aprovecho para regresar por el lugar donde practico con Simón cuando no estamos trabajando, la vista es tan bonita...
Los colores del mar me dejan siempre sin aliento. Y, de repente, de la nada, se me atraviesa un chico que al parecer esta practicando movimientos de freestyle.
-¡Cuidado! - grito cuando estoy a punto de caer sobre el.
-¡Hey! ¡Se pide permiso! - dice el chico. Y mirandome de arriba a abajo sonrie, presumido -. Seguro que buscabas chocar conmigo. A muchas chicas les interesa.
-No me inyetesa chocar contigo. Además estoy trabajando - le respondo.
Se nota que es superfresa; ademas, no es de aqui; debe ser algun turista.
-¿Si? ¿En dónde? Me gustaria hacer un pedido - dice, mientras sonrie.
Lo ignoro y sigo mi camino. La verdad tengo que apurarme y regresar a Fudger Wheels. No tengo tiempo para lidiar con un chico desconocido y, además, fresa.
ESTÁS LEYENDO
Soy Luna - El viaje comienza
Teen FictionLas vacaciones estan por terminar y los padres de Luna han decidido aceptar una inesperada oportunidad: mudarse de Cancún y comenzar una nueva vida en otro país.