Miedo a las alturas

930 119 128
                                    

Go! Fight! Win! Just do it! Let's go Breakers!

En ese efímero instante, en mi cabeza retumbaban los gritos de ánimo de los entrenamientos, casi como si los escuchara y estos estuvieran animándome, aunque sabía que en realidad era un intento por mantenerme distraído de lo que estaría pasando en el escenario en cuestión de nada. Traté de concentrarme y no mirar a los expectadores, pero esa era la primera vez que hacía algo como eso, los nervios me estremecían. No se trataba de una exhibición de judo. Cualquier leve movimiento erróneo podía arruinarlo todo.

Kazu pasó al frente para iniciar la presentación, su voz nerviosa lo traicionó por un momento, pero cuando gritó con energía, el público aplaudió. No sé si fue su voz resonando en todo el lugar o si fueron los aplausos el detonador de mis latidos martillantes, esa era la primera vez que sentí esa rara sensación en mi estómago, similar a los nervios del momento, a la vez que diferente. ¿Más agradable, tal vez?

Las luces se encendieron, dispuestas a alumbrar el espectátulo, yo me moví a mi posición. En cuanto la música comenzó, fui consciente de mi respiración trabajosa y el miedo que me recorría el cuerpo. Esto no era como en los entrenamientos. Cuando comencé a moverme, temí que mi cuerpo se pusiera rígido y se saliera de sincronía. Estuve a punto de cometer el error de dudar en el momento en debía apoyarme en mis compañeros, pero la duda se desvaneció casi de inmediato. Ellos confiaban en mí y yo en ellos. Logré elevarme sobre ellos y saltar. Entonces me dejé llevar. Era tan diferente del judo...

Nunca había estado tan lejos.

Let's go! Go! Meishiin! Go! We are Breakers!

El suave resorteo de los músculos pasando de nuestras palmas, el intercambio de miradas, el sonido de nuestro aliento...

Go! Let's go Breakers! One! Two! Three! Are you ready?

Todavía no es perfecto, ¡pero ahora mismo, lo damos todo!

* * *

Una cortina estelar púrpura ya cubría el cielo naranja en el momento en que Haru subió la azotea, horas después de despedirse de sus compañeros. Cerró la puerta sin mirar atrás y, poco a poco, se acercó a la malla por la que semanas atrás le había costado tanto mirar. Le era demasiado difícil dirigir su mirada hacia el lejano suelo; antes de llegar a ella, inhaló y exhaló para darse fuerza.

En ese momento sentí que podía hacerlo todo.

"Volarás, Haru"

Kazu fue quien me ayudó a hacerlo...

-¡¿En qué estoy pensando?! ¡Fue gracias a todos ellos! -se regañó en voz alta.

"Empezaré algo nuevo contigo"

Chasqueó la lengua, sonrojado.

Después de resignarse a sus pensamientos, suspiró y continuó dando un paso tras otro, hasta casi llegar a la malla, cerrando los ojos cuando sus dedos se aferraban a ella.

No hay de qué temer.

Al abrir los ojos, un mareo se apoderó de él y deseó echarse para atras. Entonces sintió que alguien se ponía en su camino, atrapándolo por los hombros.

-Antes lo hiciste genial, Haru. Tú puedes -le dijo para darle ánimos.

-Kazu... -Haru tenía la mirada fija en las manos que apretaban sus hombros con ligereza.

Kazu se soltó de manera repentina.

-¡Ah! ¡Lo siento! Creo que fui incómodo...

-Haces cosas más incómodas. -Se rió -. ¿Y los demás?

Breakers - Cheer Danshi!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora