LA VIDA NO VIENE CON INSTRUCCIONES

el ultimo polvo

Ella sabia que era la ultima noche que se verian y lo habia aceptado todo estaba decidido
El pensaba que mañana seria otra excelente noche como todas las que pasaba con ella, el desconocia la decision que habia tomado no por que ella no le hubiese dicho si no que el encontraria la forma de seguir teniendo una amante y a su esposa. 
-Es tarde debo irme. - Dijo ella vistiendose
-te vere mañana
- no
-esta bien entonces la siguiente semana. 
-no, te lo he dicho, este es nuestro ultimo polvo. 
-¿es por mi mujer?
-ya lo sabias esto no duraria mucho si no era la unica
-pero te he dicho que la dejaria, la dejare, te lo juro.
-No lo hagas. - dijo tajante mientras salia de la ducha 
-¿a que te refieres? - pregunto un tanto desconcertado
-no la dejes por mi. - termino de secarse el cabello y enfundandose en sus prendas 
-pero yo... - dijo intentando ponerse de pie en la cama 
-yo no soportaria ni la mitad de todo lo que ella te soporta. - dijo tomando su bolso y caminando a la salida  
-es que no entiendes que te amo. - dijo desesperado corriendo a abrazarse de sus piernas  
-Eso no es amor y si para ti esto es amor, que estupido eres, te dije que nunca te enamoraras de mi. - completo soltandose de su agarre 
-solo soy un tipo con el que te acuestas. - dijo incorporandose y mirandola con repudio  
-no, solo eres el tipo que me quitaba las ganas. - dijo ella girando sobre sus talones y dando en un portazo que resono en todo el lugar. 
- bueno, hora de ser un buen esposo. - busco su ropa, salio de la habitación mientras recibia mas mensajes de otras mujeres 
- ¿es que uno no puede portarse bien? - dijo riendose de la situación