Hoy ya una semana después de iniciar a trabajar con Matías, nos encontramos finalizando la etapa de diseño del edificio para ahora iniciar con la etapa de aprobación y luego la de construcción.
Esta noche Matías y yo vamos a presentar el diseño para que lo aprueben y si lo hacen, la próxima semana iniciaría la construcción.
Hoy salí más temprano de lo habitual para prepararme para la Cena.
Luego de que llegue me bañe y me puse la ropa ya que la había dejado lista.
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Mi maquillaje es muy natural ya que no me gusta maquillarme mucho; Matías se ofreció en llevarme pero NO acepte ya que no quiero que crea que tiene oportunidad de volver conmigo.
Luego de estar lista, subí a mi coche y me dirijo al restaurante; No me demoró más de 2min. De trayecto y al llegar entró al restaurante, apenas me ve el Maître me dirige al reservado y me va indicando que ya se encuentra Matías hay.
Al entrar saludo a Matías y me siento, a los pocos segundos se acerca un mesero y me sirve una copa de vino tinto para esperar; en menos de 10min. Llegan los demás.
Luego de cenar, Matías y yo exponemos el diseño con nuestros clientes y algunos Accionistas que asistieron.
Ya que les gustó el diseño y fue aprobado Matías se lleva el diseño y los planos para mañana nombrar a los encargados.
En este proyecto Matías y yo seremos los jefes pero yo bajo las órdenes dd este.
Luego de todo, espero que todos se vayan, hasta que sólo quedamos Matías y yo.
---Leila, ¿Hasta cuando ?--- me dice este en voz baja.
---Hasta cuando ¿Que cosa? Matias--- le respondo haciéndome la que no se.
--- No te hagas la que no sabes, te hablo de nuestra relación ¿ Es que no ves que me siento arrepentido?--- dice este con voz triste.
---Mira, "imagina que cada vez que nos hagan daño claves un clavo en la pared y cuando se disculpen lo quitas" dime algo ¿ Que crees que pasa con la pared?---digo tratando de que me entienda.
---Quedan los huecos allí---dije este tímidamente.
---Exactamente, yo ya te perdone, no tengo rencor, pero aún está el hueco hay.
---Leila, enserio lo siento--- dice este acordándose a mi.
--- Yo lo siento más , pero no hay nada que hacer--- Le digo---ahhh y por cierto no me mandes más regalos, no me vas a comprar así.
Luego de eso salgo dejándole con la palabra en la boca.
Al entrar a mi coche puedo ver por los retrovisores como Marías se monta al suyo y arranca como si tuviera mucha prisa.
Al llegar a mi casa en la puesta veo un sobre y ensima una cajita y dentro una cadenita.
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