Era de noche, la lluvia corría por las calles formando pequeños huecos mojados y corrientes. Las nubes mayormente tapaban la luz de la luna, que estaba en cuarto menguante, había frío y viento...la tormenta se acercaba.
Camine por la calle de regreso a la casa de Vale, mi mejor amiga. Esa cita había sido un completo error, pero como siempre, a mi no se me quitaba lo ingenua.
Iba llorando por alguna estupida razon, era lunes en la noche y al otro dia tendria que verle la cara de nuevo a ese imbecil, que ni siquiera se habia dignado a llevarme en su auto de vuelta a mi casa. Yo solo tenia una chaqueta, botas mojadas y un jean pegado, que ya parecia una segunda piel.
Pense que no había estudiado para mi final de matematica, y luego me rei. Las cosas que uno puede llegar a pensar cuando esta asustado o triste o lo que fuera, pueden ser muy locas.
Me aferre a mi bolso, el cual llevaba cruzado por el pecho, ya algo empapado y vacio. No queria sacar mi telefono por miedo a mojarlo o que alguien me lo robara, aunque sinceramente no habia nadie cerca de mi, aun asi...no lo hice. Era algo paranoica.
Segui caminando lo mas rapido que podia, percatandome de los carros y personas que pasaban al otro lado de la calle. Al parecer, yo era la unica en ese lado.
Calculo que eran las 8 y algo de la noche, estaba demasiado frio, tenia miedo que caminando me fuera a dar algun tipo de hipotermia pero lo descarte completamente, era imposible.
Mi cabello recojido en una improvisada trenza se iba soltando cada vez mas, buscando la manera de ser libre y esponjarse...algo que no ayudaba mucho.
Mire al frente, suspirando y contando mentalmente cuantas malditas cuadras quedaban para llegar a casa de mi mejor amiga. Era la opcion mas cercana si no queria morir esa misma noche.
Alli podria llamar a mis padres y decirles que estaba bien, llamar a un taxi y hacer que esa maldita tarde nunca habia pasado en mi vida.
Con tantos pensamiento en mi cabeza, fue totalmente imposible darme cuenta que por donde pase, habia un gran charco de agua; mis botas de tela empapadas totalmente no sirvieron de ayuda para mantener el calor, estaba totalmente empapada...y temblando.
Las luces de varios carros me cegaban la vista, haciendome poner varias veces mi mano en mis ojos, para no quedarme ciega.
Trataba de correr con la suerte de que si un carro pasaba por mi lado, no tratara si quiera de mojarme, aunque unos 2 lo consiguieron, dejando mi mas que mojado bolso, escurriendo.
Tambien, mi corazon palpitaba a un ritmo totalmente ilegal cuando un carro pasaba muy cerca y lento, bajando la ventanilla y dejando ver a hombres diciendome "¿te llevo?" "¿A donde vas muñeca?". Yo podia morir esa noche, pero no iba a morir violada.
Creo que a estas alturas de la historia ustedes se preguntaran "¿porque no pidio un taxi?" O "¿porque sencillamente no llama de su telefono quedandose en algun lugar bajo techo?", pero creanme totalmente cuando les digo que hice eso tantas veces hasta cansarme, bueno...lo del lugar bajo techo, termine esperando el taxi -que por cierto, nunca llegó- bajo el mini-techo de una pequeña bodega cerrada cuatro cuadras mas atras de donde me encontraba ahora.
Estaba sola, en la avenida mas grande de la ciudad, tratando de salir con vida.
Trate de pedir otros taxis mientras caminaba, pero era imposible que me prestaran atencion. Algunos iban ya ocupados, otros apresurados para resguardarse de la tormenta, otros simplemente, dejandome ahi tirada.
Perdi la cuenta de cuantos suspiros habian salido de mi, y tambien quede seca, mientras que las ultimas lagrimas que caian de mis ojos se mezclaban con la lluvia.
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Noche de luna.
AdventureNunca salgas una noche de luna, con tormenta y un lunes en la noche. Menos si tienes que estudiar para tu ultimo examen de matematica, no sabes lo terrible que puede ser. Pero si quieres saberlo, yo misma te lo hare creerlo...