Narra Integra desde su alcoba:
-Han pasado dos años desde que termino la batalla librada en Londres. Mil soldados del "Tercer Reich" Tres mil soldados de "La Novena cruzada" y tres millones de ingleses, quedando solo yo, Seras y Alucard. Él desapareció dejando sólo un cubo de concreto con el sello Cromwell- inhaló un poco de su puro -Trajimos al calabozo su ataúd y ése cubo- exhaló tabaco dejando escapar un suspiro, a lo lejos pudo mirar a través de su ventana que estaba anocheciendo. Se quitó la ropa, dejándose solo una braga y su camisa.
-¿Qué le sucede a la ama Integra?- Seras Victoria sirviente del vampiro Alucard, estaba haciendo su vuelo nocturno como cada noche la hacía -Hay cosas en las cuales no hay que meternos Mignonette- el alma en su interior Pip Bernadotte -Jé, tiene razón Bernadotte-san- bebía un poco de sangre médica -Mejor continuemos Mignonette- -Sí, terminemos con el vuelo de esta noche Bernadotte-san- Seras continuo su vuelo nocturno.
-Ah...- volvió a tomar otro puro Integra y se puso sus sandalias -Hace tiempo que no visitó el calabozo, sólo iré a dar un vistazo- Integra salió de su habitación, se encaminó hasta el final del pasillo donde estaban las escaleras, se tomó de los hombros ya que comenzó a sentir un poco de frío, miro que las ventanas no estuvieran abiertas, no le dio mucha importancia y continuó su pequeña travesía. Finalmente llegó al pasillo que lleva al calabozo, cada paso que daba ella una brisa completamente fría se sentía sobre su cuerpo casi desnudo, se frotó un poco su brazo, por un instante pudo sentir la mano de Alucard en su hombro "Imposible, él desapareció hace dos años" dio media vuelta para comprobar si sólo era su imaginación -Debió ser mi imaginación de nuevo- exhaló humo de su puro -De verdad lo extraño a él- bajaba las escaleras y el frío era más insoportable e Integra comenzó a jadear por falta de aire pensó que estaba escalando una montaña -Creo que me voy a desmayar...maldición- ella cayó pero en su caída unos brazos la atraparon.
-Integra despierta, mi querida ama despierte- era la voz de Alucard, era lo que Integra quería oír después de todo este tiempo, cuando pudo abrir los ojos buscó primero el rostro pálido de su sirviente -Es un sueño ó sigo desmayada- se quitó los anteojos -No, esto es real mi querida ama- Alucard miró sus ojos azules -Ya veo- Integra observó que aún estaba como vino al calabozo, abrazo a su fiel sirviente -Espera ¿Qué haces?- Alucard quedó atónito ante el acto de su ama, miró que ella entrelazo sus brazos a su cuello al mismo tiempo que sus piernas se acercaron un poco a su pecho, cuando ella terminó el entrelazamiento lo abrazo fuerte -Hay muchas cosas que quiero decirte, tanto que quiero hacer contigo- Integra confesó mientras le susurraba al oído -Yo también...- -¡Shh!- lo calló -Déjame terminar, desde que era niña mi vida siempre estuvo en peligro, pero siempre estabas allí para salvarme. Será que eres demonio, pero ví en ti un ángel, sonará absurdo, pero es lo que siente mi corazón- Integra le tomó una de sus manos mientras se incorporaba a levantarse de nuevo, con la mano que ella le tomó la llevo a su pecho dirigiéndolo a su corazón -Mi corazón a pesar de que está muerto comenzó a latir de nuevo desde que mis ojos te miraron la primera vez, sé que soy un alma errante que tiene más de 5 siglos de vida, pero me enamoré poco a poco haciendo sentir vivo mi pálido ser- Alucard susurró también -Entonces ¿Qué esperas para romper el hechizo?- Integra lo tomó de su rostro acercándolo hacía ella lo suficiente como para que se besarán, pero Alucard la detuvo con un dedo en medio de ellos dos -Aún no es el momento mi amada líder. Ya llegará el momento adecuado- Alucard comenzó a desaparecer -¡Alucard! Espera no me dejes- las lágrimas de Integra comenzaban a brotar -Siempre estaré contigo, en tus noches largas, en tus tristezas, en todo. Dijiste que era un ángel para ti ¿No? Entonces trataré de serlo- Alucard desapareció por completo -¡Alucard!...-.
Integra despertó en su alcoba confundida por saber sí era su imaginación o fue un simple sueño, se puso los anteojos y buscó primero sus guantes, lo más peculiar era que encontró el guante derecho con el sello Cromwell. Se puso el guante con el sello y el mismo sello brillo por sí solo, finalmente pudo escuchar la voz de Alucard: "-Dije que siempre estaría contigo y eso haré mi querida ama-". Integra sonrío mientras le brotaba una lágrima de alegría -Como dije anteriormente, tal vez seas un demonio pero para mí serás un ángel que siempre me cuida. Espero volver a verte mi fiel sirviente, aunque pasen los años aquí estaré esperándote.-
Fin...
ESTÁS LEYENDO
Ángel Mío
RomanceDespués de la batalla de Londres, Integra comienza a tener un extraño comportamiento ¿A qué se deberá?