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el chico ya no se encontraba ahí y tampoco el canasto....

Joshua notó que aquel chico pelilargo ya no se encontraba en su campo de visión y posiblemente ya estuviese incluso fuera del edificio. Tomó rápidamente su chaleco y salió corriendo a buscar al mayor ya que a su parecer este aún se encontraba lastimado y no permitiría que se lastimara más.

Al salir del edificio logró identificar al instante a aquel chico pelilargo él cual se encontraba tirando flores con la mirada baja y caminando sin rumbo alguno con las miradas de la gente posadas sobre él queriendo de alguna forma borrarlo de la faz de la tierra cosa de la cual Joshua no entendía el porqué pero de un segundo a otro las miradas se posaron sobre él al momento en el que comenzó a caminar hacia el pelilargo, miradas que no reflejaban nada mas ni nada menos que la unión del asco y la lastima mezcladas.

Ignorando de un momento a otro las miradas tomo la mano del pelilargo el cual se volteó a verle desconcertante y cuando noto de quién se trataba le sonrió pero Joshua no correspondió la sonrisa más bien le miró con preocupación

-¿Qué haces aquí? Deberías estar descansando, tu tobillo aún no está bien- le regañó Joshua intentando tomar el canasto entre sus manos más sin embargo el pelilargo no dejó que este lo tomase- Vamos....debemos volver- pidió Joshua volviendo a intentar tomar el canasto pero nuevamente el pelilargo lo quito antes de que el castaño pudiera tomarlo

En esa situación quien les viera podría decir sin duda alguna que parecían niños pequeños peleando por quien tenía la razón y a quien le deberían de hacer caso...

Joshua en otro de sus intentos por fin logró tomar el canasto y cuando volteo a ver al pelilargo le notó algo de tristeza en sus ojos y sus manos rápidamente comenzaron al temblar en el mismo instante en el que Joshua le había quitado el canasto. Los labios del pelilargo se abrieron intentando decir algo pero las palabras simplemente no salían de su boca y su labios inferior comenzó a temblar, eso preocupó a Joshua por lo cual decidió devolverle el canasto y así hizo. Las manos del pelilargo dejaron de temblar al igual que su labio y entre sus lastimadas pero delicadas manos tomó una pequeña flor hecha de hojas secas que había hecho y se la entregó a Joshua con una mueca neutra en sus labios, sin expresión alguna

Joshua gustoso tomo la flor artificial acariciando accidentalmente un poco la mano del pelilargo, acto el cual ocasionó que al pelilargo se le suavizará su mirada y se sonrojaran levemente las mejillas ya que nunca antes había tocado o había sido tocado por una persona con tal suavidad

Joshua se situó a un costado del pelilargo y notando como aún recibió aquellas miradas las ignoró por completo y comenzó a caminar junto a él contrario- ¿Te puedo ayudar?-preguntó Joshua con una sonrisa recibiendo una cara sorprendida por parte del pelilargo el cual ocultó levemente su cara con su sombrero negro. Joshua tomó eso como un sí y nuevamente la quito el canasto de las manos al pelilargo el cual está vez no se quejó y simplemente siguió caminando a lado de Joshua. Podría parecer que todo estaba tranquilo peor ahora millones de preguntas se filtraban por la cabeza de ambos chicos. En el caso del pelilargo sus preguntas eran referentes a porque un »extraño« estaba ayudándole con aquella labor la cual es susodicho consideraba como un deber....pero todo era diferente dentro de la cabeza de Joshua y todas sus preguntas eran reunidas en una sola "¿Cuál era la causa de todo esto?"  , pregunta la cual difícilmente contestada por el pelilargo

Pasaron el resto de la mañana tirando las flores por todo lugar y eso había sido una ayuda para ambos, porque ahora el pelilargo confiaba más en Joshua y Joshua se sentía feliz de haber pasado así aquella mañana, junto al pelilargo. Una vez que la canasta estaba nuevamente vacía el azabache pelilargo y él se dirigieron nuevamente a casa del último. Llegando al departamento Joshua dejó el canasto en la mesa y noto como al instante el contrario ya se encontraba en el sillón haciendo más flores, lo cual le preocupó puesto a que él pelilargo por lo visto se privaba del sueño si no terminaba las flores a tiempo lo cual poco a poco afectaba la salud del mayor y si, eso era lo que más temía el menor, que algo le fuese a suceder al pelilargo, pero eso era algo que uno no podía saber...después de todo cualquier cosa puede pasar en este vida,¿no?

El extraño de las floresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora