Patricia,Victoria,Marcelo y yo, somos de Sevilla, pero nos hemos ido a vivir a Madrid para conocer a nuestros ídolos. Un 8 de mayo de 2016 era mi cumpleaños, pero además, era el día del concierto y la firma en Alcalá de Henares. Patricia y Marcelo me tenían preparada una fiesta de cumpleaños en la firma, pero yo no sabía nada, así que Victoria me levanto temprano y me llevó hacia Alcalá. Allí estaban todos deseando que llegara para darme la sorpresa. Cuando llegué vi un escenario con el telón echado, me pregunté qué era y claro, yo eso no me lo esperaba... Cuando abrieron el telón, vi allí a mis 5 ídolos y no sabía como reaccionar, si gritar o llorar de la ilusión, unos minutos después, empezaron a cantar el cumpleaños feliz, me preguntaron que si quería subir con ellos y yo sin pensármelo dos veces subí encantada y emocionada.
Ya pasada toda la fiesta y la firma terminada, era la hora del concierto, y yo iba feliz y tranquila con mi entrada en la mano; en la puerta del recinto estaba David,i cantante favorito del grupo, que me buscó en la fila y me dijo:
- Vamos ve conmigo y entra
- ¿Pero, espera David, y la entrada?
- A ti no te hace falta, es tu cumpleaños.
- ¿Pero entonces?
- No sé, dásela a tu amiga.
Mis amigas tenían entradas, pero vi a una chica que no tenia, y decidí dársela. Fui con David, que me llevó hasta los camerinos donde estaban los demás; Alvaro, Blas, Carlos y Dani se acercaron a mí, me dieron dos besitos, un abrazo y las felicidades. Me pareció raro que David no me hiciera nada y le pregunté el porqué, me dijo que tenía preparado algo mejor...
Su "regalo" era que estaría todo el tiempo con ellos en el escenario cantando todas sus canciones y eso ocurrió de verdad, aunque solo me dejaron algunos solos y eso me pareció demasiado porque estaba emocionada y muerta de vergüenza.
Pasada por lo menos una hora de concierto, me entraron ganas de hacer pis y bajando tan deprisa las escaleras del escenario me caí de boca y me meé encima del susto, estaba mas muerta de vergüenza que antes... Mi amiga Victoria, que no sé porqué, siempre lleva una muda en su mochila, me dejó sus pantalones y me los puse tranquilamente y cuando volví me pidieron que subiera otra vez pero esta vez les dije que no porque pensaba que todo el mundo se iba a reír de mi y me quedé abajo disfrutando como si no hubiese pasado nada.
