Capitulo III

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- ¡Kyung Soo! ¿Cómo fue estar en una prisión como esa?

- ¿Cuál prisión? - dije en cuanto vi a Sehun recargado en su porche color negro que apenas había comprado.

-Pues de la que acabas de salir, te extrañe- Sehun se separó un poco de su carro y me dio un abrazo.

-Eres un exagerado, si solo fueron 4 horas, ahora quítate-le dije mientras me trataba de separar de su hostigoso abrazo- ¿Y de dónde sacaste ese carro?

- ¡Oh vamos! ¿No me digas que no me extrañaste? -dijo mientras me jalaba hacia su cuerpo para así continuar con su abrazo.

-No, de hecho, fueron las 4 horas más tranquilas de mi vida. Ahora dime de donde sacaste eso- y señale el auto color negro.

Desde lo que paso lo de mis padres había estado asistiendo a un psicólogo ya que, supuestamente, los doctores que me revisaron esa vez dijeron que tal vez había quedado con un trauma debido a lo que había visto aquella noche; desde entonces mi relación con la psicóloga Sojin.

Se hizo cada vez más cercana y ella me ofreció trabajo como su asistente cuando cumplí los 18 años. Acepté de inmediato, necesitaba dinero ya que no tenía a nadie más en este mundo. Solo a Sehun que conocí hace 8 años exactamente.

-Lo compre anoche, es hermoso ¿verdad?-dijo Sehun mientras miraba su auto.

- ¿Anoche? ¿De dónde sacaste tanto dinero? - dije un poco desconcertado.

-Ahhh eso...- Sehun comenzó a dirigirse a la puerta del copiloto.

-Sí eso, de donde sacaste el dinero para semejante auto.

-Entra al carro te llevo a tu apartamento y te explico ¿está bien? - esta vez Sehun estaba distraído, pensando en otra cosa; no estaba como hace unos minutos.

Entre a ese carro tan lujoso. De verdad no conseguía saber de dónde había sacado dinero para comprarlo, estaba seguro que este vehículo valía muchísimo dinero, y tampoco es como si él lo tuviera pues igual estaba como yo, solo y sin un peso.

Hemos vivido casi 5 años aquí en Busan la cual está situada en extremo sudeste de la península de Corea, tiene unas montañas que la rodean en el norte y oeste por la cuenca del rio Nakdong. Sehun y yo vivimos exactamente en Busanjin-gu.

-Entonces, te escucho- le dije a Sehun mientras mirada por la venta.

-Pues tengo un trabajo hace unos años, pero no te lo dije porque me da vergüenza-él dijo un poco nervioso. Yo nunca lo vi que se fuera a trabajar, la mayor parte del tiempo se la pasaba pegado a mí.

- ¿De qué has estado trabajando? ¿Y cómo es que te da vergüenza decírmelo? Por dios Sehun, nos conocemos desde ya hace tiempo-dije un poco irritado ante tal situación.

-Pues por eso mismo- fue lo único que dijo.

-Bueno, dime que trabajas para conseguir tanto dinero como para comprar este auto-dije más tranquilo mientras lo veía y esperaba una respuesta.

-No te diré-dijo.

-Sehun... No me digas que estás trabajando en algo sucio-la verdad no sabía si molestarme si trabaja en algo así ya que, desde hace un tiempo, he estado planeando entrar a uno de esos trabajos para encontrar a quien mato a mis padres... si es que aún está vivo.

- ¿Queeee? Yo no estoy trabajando en algún Strip Club - grita y sonríe- Aunque bueno no voy a negar que tengo buenas nalgas, pero como se te ocurre eso Kyung Soo -y se empieza a reír.

The Savant | KaiSoo |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora