Era un día caluroso de verano en la Casa Truños. Ella dió a luz ese 5 de junio. El bebé era peculiar, tenia trozos de excrementos por todo el cuerpo. Los padres no dudaron en llamarla Aroa, aunque su madre dijo que siempre la llamaría Truñarka, en honor a la Casa Truños.
Al día siguiente, la pequeña Aroa se encontraba en el hospital aún, y le llevaron a una sala en la que había muchos bebés, aunque algo mas limpios que ella. De repente, apareció.
La pequeña que entraba en una sillita de ruedas parecía ser recién nacida. En la etiqueta se podía leer "Ana". Era un bebé gordito y de piel blanca como la nieve. Tenía ojos verdes, cosa que hizo que Aroa se interesase. Tenia una bandana en la cabeza que le hacia resaltar sus pequeños ojos.
Pusieron a Ana a la par de Aroa, y solo hizo falta un movimiento de cabeza de Ana-quien estaba mirando a Aroa con fascinación- para que Aroa se enamorase completamente.
Pero eso no acabó ahí. A Aroa le dió un subidón y empezó a hacer pistolitas con sus diminutas manos. Ana reconoció aquel movimiento, seguramente por las extrañas alucinaciones que veía sobre unos coreanos.
Las dos bailaron muy felices, hasta que Aroa notó que cada vez estaba más lejos de la pequeña Ana. Se la llevaban.
No sabía si la volvería a ver, pero estaba enamorada. El pequeño excremento empezó a gritar y llorar. Ana, antes de dejar la sala, le guiñó a Aroa, cosa que a la Truñarka le hizo sonrojar.
Lo que no sabia ninguna, era lo que pasaría 13 años después.
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Holaaa! Este fanfic es mejor que no lo leas, si lo has leído, estás a tiempo de escapar, a no ser que seas Aroa o Ana la que lo está leyendo ehehehehehehehe.Gud bai <3
ARANA IS RIAL BIACHES BV