El SECRETO DE SABRINA

PRIMERA VÍCTIMA

Era 1998, estaba con mi hermana Eloise, ella tenía 8 años.  

Aun recuerdo muy bien como era ella; sus ojos azules tan claros, capaces de iluminar completamente esa noche tan oscura en la cual estábamos. Su hermoso cabello negro y lacio caía sobre mi cabeza esa noche. Era bastante largo, pues le llegaba mas abajo de la cadera. Su piel tan blanca y delicada, podría sólo rozarse con una pared totalmente lisa y su piel se tornaba roja, como si alguien la hubiese golpeado con una fuerza inimaginable. 

Septiembre 1 de 1998, era de noche cuando decidí ver una película con mi hermana. Mi genero favorito es el romance, pero a Eloise le encantaba el terror, así que decidió engañarme y poner una película de terror aquella noche. No soy alguien que ponga muchos problemas por eso, aún así no me gusta para nada el terror.

-Se que te encantará, ésta película es genial.- dice ella con mucha emoción. 

-¿S-segura?- Le pregunto, con miedo incluso sin haber empezado la película.

Ella apaga todas las luces, y empieza la película. 

La película trataba de un asesino, entraba a las casas de noche en busca de sus víctimas, todas sus víctimas eran niños pequeños.  

Esto me lleno de miedo, la película iba por la mitad y yo no lograba parar de temblar.

Vi como Eloise se paraba sin despegar sus ojos de la película.

-Ya vuelvo, iré por algo de beber.- dice, aún sin despegar los ojos de esa espantosa película.

Sale de la habitación, no sabía que hacer, tenia mucho miedo, ¡estaba sola en ese cuarto! ¿y si viene ese asesino por mi? 

Vi una caja de herramientas en el cuarto así que me moví gateando hacia ella y me senté ahí, cubriéndome con mi sabana anti fantasmas, violadores y asesinos. 

Estaba tan asustada, lo único que podía calmarme era decirme a mi misma una y otra vez "piensa en cosas rosas".

-Vamos Sabrina, piensa en cosas rosas, gatitos, vestidos, zapatos, unicornios, arcoiris, un jardin, el sol, minnie, ¡muchas cosas lindas! Vamos, por favor, piensa en eso.- Me repito una y otra vez.

De repente escuché los pasos de alguien queriendo ser silencioso, es un gran don mio poder escuchar muy claramente, escuchaba esos pasos queriendo poder ser silenciosos pero.. no podía, ¡eran los pasos de un asesino!  ¿¡que hago!? ¡Me asesinarán! Aún soy muy joven, esto no puede acabar así.

Extiendo mi brazo un poco hacia la caja de herramientas, pongo mi mano sobre algunas herramientas para lograr atrapar alguna.
De un momento a otro, siento como alguien posa sus manos sobre mis hombros, susurrándome levemente "Buu".

Sin reaccionar, agarro lo primero que sentí en la caja de herramientas; un destornillador.
Me giro con una fuerza increíble, no tenía ni idea de que tenia tanta fuerza. Me giré como si tirara una roca, y con el destornillador le di justo en la cabeza a... ¿¡MI HERMANA!?

-¡Eloise!- suelto un grito ahogado.

La vi caer, de su cabeza sólo salia sangre, demasiada sangre. Me puse mas pálida de lo que ya soy, no sentía mis piernas por el miedo. Dios, maté a mi hermana, ¿que se supone que haces cuando tu misma matas a la única familia que te quedaba? No puedo hacer mas que mirarla espantada, toda la noche ahi, sentada sin poder hacer más, ya no importaba si entraba un asesino real a casa, maté a mi hermana, sin darme cuenta la maté, y no hay nadie que me ayude. 

Solo podía ver como el charco de sangre se extendía mas y mas, llegando a mis rodillas, alrededor llena de sangre, mientras por mis mejillas caían lagrimas.

Pasó una noche entera..

Llegó nuestra acudiente, o ahora, mi acudiente.
Ya eran alrededor de las 7 a.m, ella trabajaba y su turno era nocturno, no estuvo en casa durante esa tan larga noche.

Ella sabia que veríamos una película, así que fue a buscarnos a esa habitación para asegurarse de que todo estaba bien, ya que sentía un olor horrible.
Al entrar y ver gran parte del cuarto lleno de sangre se pone palida, me mira a mi, con mis mejillas encharcadas, rodeada de sangre, y luego, ve a mi hermana... ella ahí tirada en el suelo, sus labios se habian tornado violetas y sus ojos quedaron abiertos, daba mas miedo aún.

Ella grita con mucha fuerza y miedo, sale corriendo de la habitación directo a llamar a emergencias.

Quien iba a pensar que mi primera victima fue... mi hermana.