El amor todo lo cambia

Y ahora..

Narra Luna

Que me hablará de esa forma me estremecia ¿Pero por qué? Su pregunta ¿Por que te pone tan nerviosa tenerme cerca? Me hiso pensar más de lo que hubiera deseado y sólo pensaba ¿Y ahora qué le digo?

- Matteo, y-yo.. No estoy nerviosa-

- Uf, Claro- dice burlón.

- Es en serio Matteo, ahora ¿me podes dejar ir a la pista?-

- Déjame pensarlo.. Emm.. NO-

- Matteo déjame o sino- Matteo no la dejo terminar y se acercó aún más a ella.

- Sino ¿qué?- Dijo juntando su nariz con la de Luna.

- Que se supone que está pasando aqui -Grita Ámbar enojada.

- Yo.. mejor me voy- dice Luna y Ambar la agarra del brazo.

- Vos te quedas acá- dice Ámbar Mirandola con Rabia.

- Ámbar, es mejor que la sueltes- Interviene Matteo.

- Vos no me das órdenes Matteo-

- Me cansé deja de creer que tenes el derecho de tratar mal a otros eres un fastidio- Le dice Matteo.

- Y no sabes lo mucho que puedo seguir fastidiando tu vida y la de esta chiquita, conmigo no se juega Matteo Balsano- Le responde Ámbar.

- Tus amenazas me tienen sin cuidado, sólo te digo que con Luna no te metas- Dice apuntadole con el dedo y separando la de Luna para luego ponerse frente a esta para protegerla.

- Vas a pagar muy caro por esto, van a pagar- Ámbar gritaba descontroladamente.

- Seguí hablando sola, vamos Luna- dice Matteo y sale de los Lockers con Luna.

Ámbar comenzó a tirar todo a su paso hizo un verdadero escándalo cuando alguien la detuvo

- Oye, tranquila- Trata de calmarla Simón.

- No me toques- Grita ámbar furiosa.

- No pienso hacerlo sólo quiero que te calmes-

- Mejor vete y déjame sola-

- Y dejar que destruyas todos los lockers, no lo creo- dice riendo. -vamos te invito algo-

Narra Ámbar

Yo ya había visto a este chico pero ¿Dónde? Claro.. claro.. el fue el que me tiro todo el licuado, es hora de vengarme.

- Bueno vamos- dice Ámbar con una media sonrisa.

Cafetería

- Luna.. ¿Luna? Estas bien, podes hablarme... ¡Luna!- Dice Matteo.

- ¿Por qué Ambar es así?-

- Si supiera podría responderte-

- Fuiste su novio Matteo, no me podes decir que no la conoces-

- Si que puedo, Luna nosotros nunca fuimos novios, digo si éramos novios pero porque debíamos serlo.-

- No te estoy entendiendo-

- Digo que ella siempre fue la mejor en todo al igual que yo y era lo más obvio, creo que siempre fue todo por conveniencia-

-¿Y por que no estas más con ella? Segun veo las cosas no han cambiado, vos seguis siendo el mejor en todo al igual que ella-

- No me gusta su forma de tratar a otros y se que un tiempo atrás eso era así pero ahora no puedo soportar que sea como es y no quiero estar con alguien así y no me importa más lo que opinen o no de mi-

Narra Luna

El Matteo que había dicho todo eso no era el mismo que yo había conocido no era el mismo que Ambar creía conocer

- Supongo que ella tampoco te conoce-

- Nadie me conoce Luna, excepto Gastón y..- Dice y se queda pensando.

- ¿Y?- pregunta Luna.

-Y ahora se podría decir que vos conoces un poco más de mi.. más de lo que todos conocen-

- Me agrada que demuestres quien sos en realidad..-

- ¿Por qué?-

- Sos muy dulce..-

Narra Matteo

Luna acaba de decir que yo era dulce.. era inevitable sonreír ante este comentario, ella se puso automáticamente roja, se veía muy ¿Linda? No linda no era la palabra estaba simplemente Hermosa..

Narra Luna

Que acabo de decir!? RAYOS, a Matteo se le iluminó la cara y empezó a sonreir y yo no podía dejar de hacer lo mismo.. ¿Por qué dije que el chico fresa era dulce? Corrección ¿Por qué dije que el Chico NO tan fresa era dulce?

- Y eso que aún no me has besado..- le dijo Matteo en respuesta Luna rodo los ojos y puso cara de "aquí vamos de nuevo".

- Retiro lo dicho- decía Luna mientras levantaba las dos manos. - Eres el mismo chico creído.

- No podes ser tan cruel- dice Matteo haciendo voz de dolido. - Me decís cosas lindas y después las negas-

- Eres tan TAN insoportable- le dijo Luna intentando no reír.

- No me cambies de Tema de verdad crees que soy dulce..-

En ese momento llega Ámbar seguida de Simón.

- Y querés un licuado o un pastelito o no se agua, un té- decía Simón.

- Un licuado de... Mango con dos pastelitos de vainilla- le respondió Ámbar.

- Enseguida Señorita- Dice y se retira a traer el pedido, 5 minutos más tarde. - Aqui esta.. un licuado de Mango y sus pastelitos de Vainilla-

- Gracias... espera no te vayas, siéntate conmigo-

- Bueno- dice Simón y ni bien se sienta Ambar le vacía todo el vaso de licuado y se ríe a carcajadas.

- No te lo tomes a mal, ahora estamos a Mano-dice y trata de levantarse.

- No lo creo- dice Simón y se levanta y abraza fuerte a Ambar como para mancharla con el licuado que está le tiro.

- ¡Descerebrado! Que se supone que hiciste, mira mi cabello y mi ropa ¡Aaaahggg!- grita Ámbar.

- Y eso no es todo- dice y le embarra en la cara uno de los pastelitos.

- Ahora si te mató- dice Ambar y agarra el pastelito y lo lanza pero Simón se agacha y cae justo sobre la cara de Tamara.

- Me pueden explicar QUE ESTÁ PASANDO- Grita y todos se quedan callados.