Una vida cotidiana

El comienzo..

Se podía escuchar como la tormenta golpeaba con fuerza el techo de la casa, eran las 01:30 ha día madrugada y costaba conciliar el sueño.  Me acerqué a la ventana a observar el temporal, era final del invierno y estas eran las ultimas temporadas frías. Podía seguir las gotas que caían con la mirada y al otro lado del camino podía verla, a esa niña que llevo dentro, empapada con la mirada triste con aquella media sonrisa, aquellos cabellos lacios marrones esponjados con en el agua.

-No tienes frío?- le grité
-No - me respondió - estoy bien- y sonrió. Le faltaba un diente, un incisivo, era una ternura, la niña que fui un día.

- No ha sido fácil verdad?- me miró seriamente y sus ojos se tornaron oscuros.
-Es más fácil que todo lo que tú viviste..!- le dije molesta y cohibida conmigo misma
-porque lo dices?- volvió a replicar
-Quieres que te cuente de nuevo..?- le pregunté dándole la espalda a la ventana

Me sobresalte del susto, apareció repentinamente frente a mi, toda mojada y fría, descalza con una remera blanca y unos jeans cortos, le dolían las rodillas, las llevaba raspadas. Tomé una toalla y la envolvi con ella, me gustaba secarla era divertido, escuchar mi propia risa de niña, la besé en la frente y la lleve junto a mi bebé y nos acurrucamos en la cama.

-Quieres oír la historia?!-
-Si.. No quiero olvidar quién soy!- dijo la niña
- Esta bien... Aunque no sea un cuento de hadas- dije yo y suspire..