3a temporada- 50 Sombras de Rubius [Fan Fiction]

Capítulo 13

Antes de que leáis el capítulo,  he creado una cuenta oficial de la novela en Instagram.  En ella voy a subir Mini historias que no aparecerán en la novela, fotos y contenido único.  Aparte quiero que sea esa cuenta de Instagram para tener más contacto con vosotras,  mis lectoras. Prometo subir edits,  fotos e historias de Luca,  Kayla, Mangel....  Y si no seguís la cuenta... Os perdereis cosas únicas sobre la novela. No es por meter presión peeeeeeeero prometo que seréis adictas a mí cuenta....

((((nombre de la cuenta ---> 50_sombras_rubius)))

Corred a seguirme y a dar mucho amor a la cuenta. 
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Narra _______

Me senté en mi nueva oficina,  como me han ascendido ahora tenía un pequeño despacho con un escritorio y un sofá. Poco a poco iría decorándolo.

Llamaron a la puerta de mi despachito y por un segundo me sentí importante... Hasta que me jodieron mi día de felicidad.

Pasa. Grité y abrieron la puerta.

Solo quería felicitarte por tu ascenso...  Yo sigo junto a la máquina de café. Dijo con cara de asco.

Os voy a presentar a Nora,  una compañera del trabajo. Ella me odia a muerte, debe de tener su casa llena de muñecos con mi cara y los apuñala. 
Solamente porque la superé en sacas fotografías para un artículo y mi jefe me dió más dinero que a ella.

No seas falsa,  se que ahora te gustaría quemarme mi despachito. La contesté.

Ahora no, pero cuando lo tengas lleno de cosas monas y fotos con tu novio que ha sido la lotería de tu vida...  Ahí si quemaré este despacho. Respondió.

Siempre me echa en cara que todo lo que me pasa bueno en el trabajo es porque Rubius está conmigo. 
Que soy una caza partner.
Etc...

Narra Violet

Salí de clase pensando en Tate...  Voy a ser sincera,  cuando salía de clase entre tantas personas solo buscaba el pelo rubio de Tate, su cara de psicópata extremadamente atractivo,  su piel blanca como el culo de un ángel y su forma curvada de andar.
Iba hacia la salida del instituto cuando derrepente se me coloca delante de mí haciendo que diese un salto hacia atrás.

Mi dirección. Dijo cogiendo mi mano y poniéndome un papel para después cerrar mi mano de nuevo.

Se giró y corrió a la salida donde tenía una bicicleta roja,  me volvió a mirar y medio sonrió.

Guardé el papel en mi mochila...
Enseguida me acordé que tenía que ir a por Luca.

(...)

Perdone,  me habían dicho que los alumnos salían a las 4:30... Pregunté a una profesora que estaba en la clase de Luca,  primero de primaria entra A.

Todos los niños y niñas han salido menos estos dos,  estaban castigados hasta que viniesen a recogerlos... Me respondió señalándo con la mirada a Luca que me miró con una sonrisa de pillo.

¿Que hizo?.   Pregunté.

Contestó muy mal a un compañero y le dió un golpe,  no pasó nada a el compañero pero ese comportamiento agresivo no puedo seguir. Respondió muy molesta.

Bueno... Hablarán sus padres con él... Ahora me lo llevo a casa. La dije y Luca salió de la clase poniéndose a mí lado.

Ah, ¿Usted no es su madre?.  Me dijo mirándome de arriba a abajo.

Mmm no, a no ser que me hubiese quedado embarazada de él con 12 años. La dije.

Es mi hermana mayor de mentira. Dijo Luca agarrando mi mano.

Le miré y le sonreí.

¿Hermana adoptada?.  Preguntó la cotilla de la profesora.

No exactamente, soy una acoplada. La respondí. Bueno ya has dejado de hacerme la entrevista sobre mi vida, me llevo al niño y adiós.  Dije y nos fuimos de la clase.

(...)

No puedes ir diciendo a la gente que soy tu hermana, porque no lo soy Luca. Le dije mientras el se comía un bocadillo que le compré en una tienda por la calle.

Mis padres me dijeron que te tengo que tratar como una hermana. Respondió.

Bueno,  te voy a dejar en casa de tu tío Mangel, que yo tengo que ir a ver a alguien. Le dije mientras miraba en mi cuaderno la dirección de Mangel.

¿Vas a ver a tu novio?.  Preguntó Luca.

Le miré asustada,  no es mi novio Tate pero como sabe el niño este que voy a ver a un chico...  A ver si va a tener poderes o algo, aveces es muy siniestro.

No voy a ver a mi novio,  no,  a un amigo. Respondí poniéndome roja recordándole cuando me dió su dirección.

Lo que tu digas rubia. Respondió.

(...)

Después de dejar a Luca con su tío, que por cierto,  era muy majo.  Me fui de camino a casa de Tate... La dirección la tenía entre mis manos e iba preguntando a la gente por donde ir hasta que llegué a una casa muy apartada y se notaba que era muy antigua. 
Iba a llamar al timbre pero me dió vergüenza y dude en llamar hasta que alguien me tocó la espalda.

Hola. Dijo una mujer me giré y me asusté bastamente.

Se colocó en plan diva con el cigarrillo mirándome de arriba a abajo.