Para comenzar debes tener un espejo: puede ser en tu baño por ejemplo. Se dice que los espejos son un misterio debido a que tienen la particularidad de atraer energías, pero también que es una especie de puerta a otro mundo paralelo.
He aquí una forma de experimentar lo que puede llegar a ser un pasaje de un mundo a otro mediante un espejo. Al finalizar el experimento, tú mismo debes juzgar ese fenómeno.
En fin, párate frente al espejo, y ten en la mano un vaso de agua. Arroja el agua al espejo. El agua es otro elemento que tiene propiedades de atracción de fuerzas negativas. Verás como el agua va cayendo suavemente en el vidrio.
Espera unos quince segundos, y alumbra el espejo con una linterna. Notarás que de a poco se van formando pequeños puntos negros sobre el agua esparcida.
Cuando logres ver con claridad esos puntos, agarra un imán, puede ser cualquiera, y colócalo justo hacia el espejo a unos dos centímetros del vidrio. Mantenlo unos cinco minutos y si funcionó el experimento, comenzarás a ver que en el espejo se empieza a formar como una especie de mancha ennegrecida, como que se destiñera el mismo vidrio, dejando esa
