Desperté a las 8:16pm, tenia calor, ¿Que se podía esperar? Vivíamos en California.
Me levante de cama y me estire un poco, me vestí con un short azul que me llegaba a la rodilla y una playera negra.
-Vaya, pero si el bello durmiente ya despertó.-Hablo mi hermano el cual entraba a la habitación, volteé a verlo y se encontraba recargado en el escritorio.-Mama ya casi termina la cena.
-Que día es hoy?.-Frunci el ceño y Jax se me quedo viendo con cara de "Es en serio?"
-Es miércoles, tonto ¿El dormir te afecto?.-Soltó una risa y negó con la cabeza.-Lavate la cara hermano, y baja... A, mierda lo olvidé, ya vuelvo iré a comprar unas cosas que me pidió mama.-Tomo las llaves de su auto.
Cuando duermo suelo olvidar el día que es, no pregunten porque solo pasa.
-A esta hora?.
Volteo a verme desde la puerta.-Cosas para la cena, yo que se, solo hago caso.
-Vale, pues ve.-Hizo un gesto con la mano y cerro la puerta.
Salí al balcón, el clima estaba agradable y hacia un poco de aire.-Hey, psst.
Salí de mis pensamientos y mire por instinto hacia el cielo
¿Dios, eres tu?
Me encontraba en el balcón.-No, idiota, mira hacia enfrente.
Baje la vista y me encontré con una chica de cabello negro, es muy bonita a decir verdad.
En que carajo piensas Nathan?.-Me reprocho mi subconsciente.
-Holi, soy Marylin, Marylin Greene.-Sonrió y se recargo en la pared de su balcón.-Y tu?
-Hola, Nathan, Nathan Cooper.-Le devolví la sonrisa.
-Por lo que podrás ver, soy tu nueva vecina y si yo te digo "holi" tu deberías de decir lo mismo.
-Vi el camión de mudanza hace un rato. No me gusta decir "holi".-Imite su voz.
Se escucho una voz al fondo de su habitación y ella respondió con un "YA VOOOOY"
-Nathan, fue un gusto hablar contigo pero mis papas me llaman, supongo que nos volveremos a ver.-Sonrió y luego hice una seña de adiós.
-Supones bien Marylin, adiós.-Repetí el mismo gesto de despedida.
Cerré las puertas del balcón y baje a la cocina.
Al pasar por la sala vi a Sarah, hablando por teléfono.
Llegue a la cocina y ahí estaba mi madre, estaba dándome la espalda aun seguía cocinando y no se ha percatado de mi presenciaMe acerque lentamente a ella hasta posicionarme detrás de ella.-Ni se te ocurra Nathan Steven Cooper.
-MAMAAA NO ME DIGAS ASI.-Odiaba mi segundo nombre.-¿Como sabias que estaba detrás de ti?
Le hice un puchero y ella sonrió.-Llevas haciendo eso por años y te conozco perfectamente.
-Esto no se quedara así.-Achique los ojos y los dos soltamos una risa.
-Ya casi esta lista la cena, solo hay que esperar a que llegue tu hermano con las cosas que faltan.-Se dio la vuelta y sigui moviendo a ahí a esas cosas... ¿Sartenes?
Si, no se cocinar.
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El Sueño De Nathan
Teen FictionNathan es un chico de 17 años, normal (dentro de lo que cabe), su vida da un giro de 180° cuando llega a casa y decide dormir. Literalmente todo cambio en un abrir y cerrar de ojos.