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Recuerdo ver como nos alejabamos de aquella pequeña ciudad en la que, hasta ahora, yo vivía .
Cogí mis auriculares, me los coloqué y comencé a jugar con mi consola portátil. En algún momento cerré mis ojos y me quedé completamente dormida.
Cuando desperté miré por la ventana del coche y pude contemplar unas vistas impresionantes, ya que, estábamos subiendo una montaña bastante empinada.
-¿Cuanto queda para llegar? - Pregunté bostezando.
+Tranquila sólo quedan dos horas.-Dijo mi madre tranquilamente.
-¡¿Dos horas?!-Dije sobresaltada- ¿Y que hago yo ahora?- Me autopregunte en voz baja. Pero mi padre llegó a escucharme.
~Podrías hablar un poco con nosotros¿no?
-Haré eso cuando me quedé sin batería tanto en mi móvil y en mi portatil-solté con un tono burlón.
+¿Has cargado tu portátil? Porque yo recuerdo que no- Dijo mientras soltaba una pequeña risa.
-(¡MIERDA! Me he quedado sin escusas) Bueno pues miraré por la ventanilla- refunfuñe en voz baja y cruzandome de brazos.
~¿Pero porque no hablas con nosotros?- Preguntó mi padre mirándome atraves del espejo del coche.
Tras escuchar esa estúpida pregunta lo único que hice fue mirarle con una mirada asesina. Él al ver mi mirada apartó inmediatamente los ojos del espejo y suspire mintras giraba mi cabeza hacia la ventana.
Conforme pasábamos unos chalets comencé a recordar algo. Era como si hubiese estado allí.
Cuando me quise dar cuenta ya habíamos llegado a mi nueva casa.
+ Ya estamos. Venga baja tus cosas.
-Voooy.-Dije mientras me estiraba.
Baje del coche y me dirigí hacia una casa pequeña que estaba en el lado izquierdo de una villa.
Cuando llege a la puerta de la casa mis padres comenzaron a reírse y mi padre dijo:
~Te has equivocado de casa.
-Ah vale.- Cogí mis cosas y me dirigí al chalet que estaba al lado derecho de la villa.
El chalet era medianamente grande, de un color mandarina, con los arcos color crema.
Cuando llegué a la puerta bruscamente salió un chico con el que me choque.
Caí al suelo y cuando levante mi mirada vi a un chico que parecía más o menos de mi misma edad con pelo castaño claro con algunas mechas azul oscuro y unos brillantes ojos azules zafiro.
Me quedé sin habla. Parecía que estaba hipnotizada.
Él me recordaba a un niño que vivía al lado de mi abuelo, al que vi pocas veces en mi vida.
Estuvimos como tres minutos mirándonos a los ojos y cuando me quise dar cuenta yo estaba totalmente sonrojada.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~Bueno hasta aquí el capítulo de hoy.
Si queréis en el siguiente capítulo puedo en señaros como son (más o menos) físicamente los personajes. Si es así dejarlo en los comentarios.
Patatita96
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Mil Y Un Pensamientos
RomanceKira es una joven de 19 años que, al terminar el instituto, sus padres deciden, sin dar explicación alguna, mudase. Eso hará que la vida de Kira cambie drásticamente. Muy drásticamente...