Advertencia: esto puede contener alto contenido de estupidez, y hay ArgChi, BraUru y ParaBoli, si no te gustan estas parejas, salte we
Un día, tres peculiares primos se encontraban aburridos en la casa de uno de ellos, Martín, como no sabian que hacer pensaron en hacer algo muy muy estupido, ser turros, la conversación fue algo así:
Estoy aburrido~ -decia un castaño llamado Daniel- Hagamos algo
Si, pero que? -dijo un uruguayo el cual estaba tirando unos extraños brillitos abrurrido-
Mmm... ya se! -exclamó un grosso argentino-
¿Que? -dijieron al unisoro Daniel y Sebastian curiosos y emocionados por quitarse el aburrimiento-
Seamos turros! -dijo ilucionado-
Si~! -dijo el castaño-
No hay nada más que hacer, así que bien -dijo un poco indiferente el uruguayo-
Ya sabía yo que les gustaría mi grosa idea -decia un orgulloso argentino-
Bueno, empesa, Tincho -dijo Dani-
Okey~ -dijo dandose la vuelta mientras sacaba unos lentes y una gorra turros, se los pone y da la vuelta- Yo sere èl Tïnçhô-
Y yo ël S€ßã$-
Y yo... emm... soy Daniel -dijo el inocente paraguayo-
Boludo, hacelo con onda, dale, hacelo lo más grosso que podas-
Ok- se va y luego vuelve vestido de turro- ya llego el Dänï, prros, dame to' lo que tene' o te navajeo wacho -dijo con un acento que sobrepasa al de los turros normales, algo así como un super-turro, dejando boquiabiertos a sus primos- ¿Y? ¿Me salió bien? -dijo inocente el paraguayo mientras se sacaba las gorras-.
Te salió re grosso, seguro fue la influencia argentina -decía orgulloso Martín-
Te salió re bien, Dani -decía sorprendido Sebastián- bueno, sigamos
Lo que no sabían, era que Luciano, Manuel y Julio los veían desde la ventana, preguntandose por que salían con estos enfermos mentales.
~Fin~