Cap. 26 "Jamás me hartaría de ti"

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Derek's pov:

Al llegar a la casa de Samantha la comencé a mover hasta que logré despertarla.

- Sam, ve a casa. Ahora voy y llevo tus cosas. - Ella asintió con los ojos cerrados y se fue caminando.

- Iré a dejar sus cosas y ahora regreso. - Dije a los chicos. Tomé la mochila de Sam y su teléfono y entré a su casa. 

Subí a su cuarto y vi que estaba en su cama boca a abajo con su pijama puesta. Me acerqué a ella para despedirme pero escuché como sollozaba.

- Sam ¿Qué pasa? - Sobé su espalda. Ella negó. 

- Nada. Te veo después. - Dijo y se tapó con su cobija.

- Sam. Dime que pasa. Soy tu novio y quiero saber que tienes. - Dije y me acosté con ella abrazándola.

- Son mis padres, no vendrán hasta mañana en la tarde. - Dijo bajo. La acerque a mi y la abrase más.

-Tranquila nena, aquí estoy. No estás sola, jamás lo estarás. Se que mi amor jamás comparará el de tus padres. Pero te aseguro que te haré sentir amada hasta donde tu me lo permitas. - Besé su cabeza y sentí como se movía para mirarme.

- Gracias Derek. Te adoro. - Me abrazó y besó mi cuello haciendo que mi piel se erizara. - Quédate hoy, por favor. - Dijo aún en mi cuello, diablos, esta chica me va a matar.

- Vo-voy con los chi-chicos a decir-decirles que yo.... - Tranquilo Derek, tranquilo. - ahora vengo. - Salí de su cuarto y fui a la camioneta. 

- Voy a quedarme con Sam esta noche. - Los chicos asintieron y me dieron mis cosas. - Lleva la camioneta a tu casa. Mañana paso por ella. - Le dije a Gilinsky y este asintió. 

Swazz me iba a dar mi mochila pero Hayes lo detuvo. Sacó una tira de condones y la metió en un bolsillo de la mochila. 

- Ahora si. Ten - Dijo Hayes dándome la mochila. Yo rodeé los ojos riendo y la tomé.

- Le diré a Nash que tenías condones en tu bolsillo! - Dije colgándome la mochila y adentrándome a la casa de Sam. 

Al entrar vi a Sam con su computadora en la sala.

- Qué quieres hacer? Tu solo dilo y yo lo hago realidad. Quieres ir a pasear, ir a McDonalds, Helado, un restaurante lujoso, solo dilo. - Ella me miró y sonrió.

- Quiero ver Buscando a Dory contigo, eso quiero. - Sonreí al ver su carita sonriente frente a mi.

- Veamos Buscando a Dory. - Dije y me senté a su lado poniendo Netflix en su televisión.

(...)

Sam estaba a mi lado con su cabeza en mi hombro y mi brazo en los suyos. Estaba viendo la película cuando siento como comenzaba a besar el tatuaje que tenía en mi cuello.

- S-Sam, ¿Qué-Qué haces? - Ella me miró.

- Me gusta tu tatuaje. - Se encogió de hombros. - ¿Porqué te pones tan nervioso? - Yo la miré.

- ¿Jamás te han besado el cuello? - Ella negó. La miré a los ojos y me acerqué a ella y besé sus labios y ella siguió el beso.

Tomé su mejilla y ella tomaba mi camisa de la cintura. Comencé a bajar mis labios por su mejilla y después por su mandíbula, bajé aún más y besé su cuello, comencé a besarlo y pasar mi lengua por el. Sam comenzó a jadear y gemir mientras pasabas sus manos por mi espalda encima de mi camisa.La quité y la seguí besando. La recosté en el sofá y seguí besando su cuello, tomé el dobladillo de su camisa y adentré mi mano sobando su cintura, pero sentí como se removía.

-De-Derek. - Me detuve inmediatamente y la miré. Estaba con la respiración agitada y me miraba apenada. - Perdón, yo... No, perdón. - Se levantó y subió a su habitación, la seguí y vi como tenía su puerta cerrada.

- Sam. - Susurré tocando la puerta. - Sam. - Dije más alto. - Perdóname, no quería que pasara esto. De verdad perdóname, soy un idiota, lamento haberte asustado, no quiero que creas que estoy contigo solo por esto. Estoy contigo por que eres hermosa, por que tu mente puede imaginar cualquier cosa y amo que te expreses sin importar lo que diga la gente, amo que tengas tu vida organizada, pero no tienes miedo de cambiar un poco los planes a veces, amo tu actitud de latina cuando las personas insultan tus raíces, amo todo de ti Samantha. - Escuché como sollozaba del otro lado de la puerta. - Te amo Samantha McColl. Perdóname. - Me senté en la puerta y suspiré. - Perdóname.

Escuché como le quitaba el seguro a la puerta, la abrió y caí viéndola desde sus pies. Me levanté y la miré. Tenía sus ojos rojos y su nariz también, sus pecas se notaban más y sus ojos estaban cansados. 

- Perdóname Derek. - Yo la miré con el ceño fruncido.

- ¿Por qué? - Ella suspiró.

- Por ser muy tímida. Eres mi novio y tienes necesidades y yo solo arruino los momentos con mis inseguridades y no es justo por que... - La interrumpí. 

- No Sam. Te lo dije, no estoy contigo por eso nada mas. No te voy a presionar, cuando tu estés lista lo haremos. ¿De acuerdo? - Ella asintió.

- Solo espero y tu no hartes cuando lo esté. - Susurró y se sentó en la cama.

- Jamás me hartaría de ti. - Dije besando sus labios. Ella sonrió. - Te amo Sam. - Ella agrandó su sonrisa.

- Y yo a ti Derek. - No pude más. Me abalancé a ella y la besé.

Estuvimos platicando de idioteces hasta quedarnos dormidos. Ella era persona de la que podrías hablar de cerdos voladores siendo cabalgados por focas y no se aburriría. Ella era la indicada. 


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Morí de diabetes, bai.

Divischidis fuera!



Save Me // [Derek Luh] // TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora