-¡Heechul!- en cuanto mi amigo abrió la puerta no pude evitar lanzarme a sus brazos y enterrar mi rostro en su cuello soltando lágrimas al por mayor mientras sollozaba como un niño pequeño. -Él me engaña Hee, yo se que el lo hace.- mis lágrimas no paraban de salir de mis ojos, tenia un nudo en el pecho que parecía no querer deshacerse, recordándome una y otra vez él porque de mi llanto.-Calmate pez, entra que los vecinos saldrán y darás un espectáculo.- sorbi mi nariz y me retire de los brazos de mi amigo.
-Bien.- Nos adentramos a su departamento. Y nos sentamos en los sofás de la sala.
Recoste mi cabeza en sus piernas. Necesitaba cariño, mi pecho dolía solo de recordar que mi novio me estaba engañando, las lágrimas se volvían a acumular en mis ojos.
No entendía porque me engañaba, yo que había dado tanto por el, había dejado a mis padres para que pudiéramos estar juntos. Daría todo lo que tengo por él, aquel al que le entregue mi amor.
Sabia que era descuidado, que a veces lo abandonaba por el trabajo pero, vamos, trataba de hacer todo lo posible para estar con el. Sabia que mi trabajo pedía mucho de mi tiempo, el ser enfermero no era un trabajo que te dejara la mayoría el tiempo libre y eso él lo sabia.
Cuando comencé a trabajar en el hospital de Seúl él jamas se quejo ni se opuso ante mis horarios que variaban. Me dejaba tener la libertad que en toda relación podría haber. Yo tampoco me quejaba de sus horarios, entendía que el manejar una empresa era una labor muy cansada y que ocupaba también mucho de su tiempo.
-¡Hey pez!- perdí el hilo de mis pensamientos cuando la mano de Hee era agitada en frente de mi cara.
-Disculpa, ¿que decías?- bufo y rodó los ojos cuando se dio cuenta que no había escuchado ni una palabra de lo que había dicho.
-Te estaba preguntando que te ocurría, ¿por que llorabas?- ví aun mas borroso ante el recuerdo de que probablemente ahorita mi novio se estaría revolcando con una cualquiera.
-Hyuk... Hyuk me engaña.- su risa me desconcertó cuando le dije lo que me pasaba. Frunci el ceño e hice un ligero puchero al ver que no paraba de reír. Me sentí herido al ver que Heechul se burlaba de mi por ser un estupido cornudo.
-No lo hago por eso Hae.- claro ¿por que no me sorprendió el que Heechul adivinara lo que estaba pensando?
-¿entonces por que ríes?- mi puchero se hizo mas pronunciado al seguir sin entender el porque de su risa.
-¡Es que no entiendo de donde salio tal disparate!. Ese mono tonto te ama, se nota a kilómetros.-
-Si me amara no se anduviera revolcando con otra.- mire hacia arriba solo para encontrarme con la cara de Hee que tenia escrito no seas estúpido pez en la frente ¡claro como a el no le estaban poniendo los cuernos!
-¿y que te hace pensar eso?- ahí estaba esa jodida preguntaba que llevaba haciéndome desde hace dos semanas exactamente.
-llega tarde.- dije sin mas.
-¿solo por eso?, yo pensé que era otra cosa. Tu bien sabes Hae que Hyukjae se la desvive trabajando para que su adorado pez tenga lo que quiere.-
-¡Hey! Para eso yo también trabajo.-
-Eso no quita su intención. Su trabajo es complicado tiene que estar mucho tiempo en la oficina.-
-Eso no justifica el que llegue tarde.- cruce los brazos sobre mi pecho - y por cierto ¿de que lado estas? Antes me decías que ese "tonto mono" no me merecía y ahora lo defiendes.- resople y una mechón de cabello se levanto levemente de mi frente -¡Vaya amigo!-
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Engaño. [EunHae]
FanfictionTodo apuntaba a que él me engañaba. El olor dulzón que desprendían sus sacos, las chaquetas o a veces su cabello. Y sabia que no era su aroma de colonia o el shampoo. Ese olor que me daba asco al punto de marearme y vomitar. -Hae ya llegue.- ahí...