Así se siente la soledad, como un clavo en el corazón, como si tu corazón fuese una piedra la cual te está aplastando el pecho.
Ese sentimiento es el que tengo mientras camino por las calles sin nadie a mi alrededor. Me siento como un pedazo de mierda, a ellos quizás jamás les importe, quizás soy uno de los tantos errores de este mundo, pero eso no importa ahora ya nada importa ahora. Lo único importante es el recuerdo de como me despreciaron,
-"¡TU NO ERES MI HIJO!, mi hijo no andaría de maricon"
Pero ... padre yo no veo nada de malo ser-
-"¡No digas eso en esta casa!,tu madre se debe que estar retorciendo en su tumba"
¡No hables de ella así! Ella me apoyaría
-"Largate de esta casa y no vuelvas, y si te atreves a volver te aseguro que lo último que verás será la puerta"
Y ahora veo mi situación, estoy solo, sin nadie que me apoya, quien me cuide, nadie a quien le importe, en un mundo en el cual la palabra "diferente" es mal vista y despreciada, un mundo en el cual eres apenas un grano de arena, un mundo el cual el libre pensamiento es sólo una ilusión y sólo somos un muñeco el cual ellos ven como basura. Y nuestras mentes son sólo marionetas de una sociedad la cual no conoce la palabra "piedad".
¿Pero a quien le importa el pensamiento de un vagabundo? A nadie, a nadie le importa, nunca importó y nunca importara
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De la tormenta a la calma
Randomserá una historia muy personal para mi y espero que les guste ADVERTENCIA: la historia contendrá escenas fuertes, groserías y temas muy delicados