*Una semana después *-Ya baje la última caja- dijo el joven de la mudanza subiéndose al camión.
-Si, gracias, yo la entro- comentó el hombre y la agarró. Una vez que entró a la casa dejo lo que tenía en sus manos en el suelo y miró a sus hijos- ¿ya han acomodado sus habitaciones?.
-Aún no- contestaron los hermanos a la vez. Cada uno tenia cajas grandes sosteniendo en sus manos.
-Pues háganlo rápido así terminaremos todo hoy- hablo su padre- dame esa caja Reina se ve pesada.
-Claro, a tu princesa sí la ayudas- sonrió el joven.
-No empieces John- habló su padre subiendo las escaleras.
-¿Quieres que te ayude debilucho?- se burlo su hermana.
-Sabes que soy el mayor y por eso me tienes que respetar ¿verdad?-
-¡Ay deja de mentirte hermano!, todos saben que soy mayor que tu por ocho minutos, tu respétame a mi- comenzó a subir las escaleras para luego parar y volver a mirar al azabache- y para tu información no soy princesa... ¡soy una Reina!-
-Si, lo que diga mi señora- rodó los ojos.
(***)
- Ayúdame a sacar las cajas con esas cosas- señalo la castaña una vez que entraron a su cuarto.
-¿Que hay allí?- pregunto su hermano.
- Objetos personales de los antiguos dueños, mejor dicho de su hija- contestó la joven con cara de desagrado.
-Tu cuarto si que se ve mucho mejor que antes-
-Ni me lo digas, luego de remodelarlo si que se nota la diferencia- observó el cuarto con orgullo- ahora parece un cuarto de alguien vivo, antes era deprimente... y ni hablar de la ropa que encontré...
John abrió una de las cajas y agarro una prenda.
-Ya veo porque lo dices... esto parece ropa de abuela- ambos soltaron una carcajada- ¿las llevamos al sótano?
-¿Para que?, no pienso guardar algo que jamas se usará.
- Tienes razón, ni para donar sirven... ¿las quemamos?, le haríamos un favor a esa gente-
-Hay veces que creo que me lees la mente- sonrió su hermana.
-¿Las dejamos en el patio trasero?- pregunto John.
-Si- la joven agarró otra caja y caminó hasta la puerta- vamos.
Ambos hermanos se dirigieron al lugar indicado...
- ¿Tienes encendedor?- pregunto John.
-Sip, alcánzame el alcohol que está en aquella caja- señaló la chica.
Hicieron lo esperado... quemaron la caja mientras miraban el fuego como si eso fue ra algo fascinante de ver, contemplando los colores y el calor que este emanaba, tenían una mirada seria y penetrante.
-¿Qué están haciendo?, ¿Por qué hay fuego?- la voz de su padre los saco de su concentración.
-Solo quemamos lo que no nos sirve- dijo la muchacha con indiferencia.
-______, eso no hacía falta- la regañó Adán Bennet, su padre.
- lo sé... pero sino, no sería divertido- sonrió.
Luego de limpiar las cenizas de lo que quedaba de las cajas, los tres siguieron acomodando y desempacando sus pertenencias. Sin darse cuenta, la mañana como la tarde pasaron volando hasta que llego la hora de la cena y el padre de familia salió a comprar comida rápida, puesto que estaban muy cansados como para prepararla ellos mismos.
Mientras... sus hijos lo esperaban en la cocina... aunque no están solos... allí unos seres fantasmales hablaban entre ellos.-Son unos niños muy raros- habló una anciana pelirroja.
-Eso es de menos importancia- argumentó una mujer de cabellos rubios- por más raros que sean debemos hacer que se vayan de la casa antes de que les ocurra lo que nos pasó a nosotros o peor.
-Vivien tiene razón, tenemos que hacer que se vayan como los demás- dijo un hombre de cabellos castaños, y prosiguieron a observar a los jovenes.
-______- lo llamó su hermano.
-Dime-
-No te vayas a encariñar con la casa... ni con ellos...- le advirtió.
-No digas estupideces, en cuanto obtengamos lo que queremos nos largamos de aquí- contestó mirando sus largas uñas pintadas de carmín.
-¿Crees qué sea en mucho tiempo?- la miró seriamente.
-No llegaremos ni al año- sonrió esta vez mirando a su hermano- luego podremos irnos sin problema y venderla...-
-O podríamos quemarla, tirarla abajo y vender el terreno-
-Nadie va a querer comprar el terreno sabiendo la historia que tiene este lugar-
-Cierto, tenemos suerte de haberla encontrado a tiempo antes de que se desasieran de ella- agregó John. La verdad era que sería la última vez que vienes raíces intentarían venderla y si no lo lograban destruirían el lugar.
Aquellos fantasmas se miraron entre ellos, claramente no se esperaban esa conversación. Sin esperar ni un minuto más bajaron al sótano para hablar con los demás y tomar una decisión.
Al cabo de unos minutos el señor Bennet llegó con la comida.
-¡Llegué con la comida!- entró a la cocina mostrando las bolsas de su mano.
-¡Qué bien! ¡Ya tengo hambre!-
- Espero que les gusten las hamburguesas- dijo Adán. Ambos hijos anteriormente vivían con su madre, ya que sus padres se habían divorciado hace años y ella quedó con la tenencia de ambos. Al cumplir determinada edad ya tenían la capacidad para saber elegir con quien querían vivir, y no eligieron a nada más y nada menos que a su padre, con el que se llevaban mejor.
-¡Nos encantan!- gritaron los hermanos al unísono. Los ojos se les iluminaron, amaban las hamburguesas y mas si estaban acompañadas con papas fritas/ patatas. En menos de una hora terminaron de comer y cada uno se fue a su respectiva habitación.
______ se encontraba acostada en su cama, ya se había puesto su camisón de colores oscuros que terminaba tres centímetros debajo del trasero. Unos golpes en la puerta interrumpieron su intento de dormir.
-¿Si?- preguntó cuando fue a abrir la puerta y vio a su hermano afuera con solo su pantalón pijama también oscuro como la ropa de su hermana, y con el torso al descubierto donde se podía apreciar "algo" marcado abdomen.
- ¿Puedo dormir contigo hoy?- preguntó rascándose el cuello.
-No te acostumbres- lo dejó pasar.
-No prometo nada- sonrió y se lanzó a la cama. ______ se acostó nuevamente y se dejo envolver por los brazos de su hermano- buenas noches.
-Sueña con ángeles-
-Nunca lo hago-
-Yo tampoco- terminó por contestar y se dejó vencer por el sueño... mañana sería un largo día...
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Murder House (Tate y Tú)
FanfictionUna nueva familia en Murder House ... nuevas victimas de la locura... ... los dueños nuevos guardan secretos... y la casa... también... Deberán confiaren su instinto y dejarse ayudar por los habitantes del pasado... Para hallar lo que vinieron a bus...