Narra Miku
Hoy como otro dia normal estabamos en la mansion Vocaloid. Estaba sentada en el sillon jugando en la consola con Oliver cuando persivo una mirada que me molestaba, era el patetico de Len. Si, Len Kagamine. Es un maldito acosador... Pero... Es mio y yo de el.
-Miku, ven-. Dice Len.
-Estoy ocupada, ¡¿Que no vez!? ¿ESTAS CIEGO?-. Respondi de mala gana, el solo me miro con algo de malicia.
Despues de un rato me pare y pense en lo que hice, oh... Esto me costaria caro.
De repente senti un jalon en el brazo y me llevaron hacia una habitacion, en mi boca una mano fria. No podia hablar.
-Me lo pagaras, pequeña...-. Esa voz...-¿Como le puedes hablar haci a tu dueño?-. Dijo con importencia.-Tendras tu merecido-. Me tiro en la cama y le puso pestillo a su puerta.
Esas palabras me hicieron temblar... No solo porque sabia que significaban, si no porque sabia quien las decia.
-P...Pero... Le...n-. Dije algo excitada ya que me empezo a acariciar mis pechos y mis pezones. Lo empeze a ver y estaba con ropa, pense que estaria desnudo...
-¿Crees que esa era forma de hablarme?-. Dijo mordiendome de forma algo violenta para mi gusto, pero me gustaba.
-P...Pero... estaba... ocupada-. Decia entre suspiros. Me empieza a desnudar con rudeza.
Se sienta y me pone acostada entre sus piernas me baja las bragas y lame su mano para acariciar mi trasero... estaba excitada sientiendo su pene cerca mio, un fuerte golpe en mi trasero me hace gritar su nombre y lo empieza a hacer mas rapido y empiezo a gritar, se sacó el pene del pantalon y me lo puso en la boca.
-Chupamelo, tragatelo entero-. Me tomo las manos y empezé a lamer. El empezó a mover sus caderas con brusquedad haciendo que yo gimiera aún con su pene en mi boca.
Lo sacó y me puso en cuatro y sin lubricación ni nada me lo metio sin piedad y brusquedad.
-Ah...Ah....Ah.... L..Len!!-. Decia su nombre entre gemidos fuertes.-M..Mas Lento...-. Senti una nalgada muy fuerte.
-Callate, yo te lo estoy haciendo y yo lo hago como quiero-. Dijo seco pero se enotaba excitado.-Sabes Miku, eres una puta...-.
-C..Calla!...-. Dije sonrojada.
-Pero eres mi puta-. Dijo dandome otra nalgada.
Me lo saco y caí rendida... Pero esto aún no terminaba. Se acostó y me subio encima de el pero de espalda y me tomo las manos y me ordeno que me moviera, obedecí.
-Aaahhh muy bien mi putita... Tienes que obedecer a tu amo-. Dijo con satisfacción.
Entre gemidos y suspiros se corrio dentro de mi sin avisarme e hice mi último gemido que fue un grito muy excitante.
Me dejo en la cama, estaba exausta... Casi durmiendome senti un beso en mi frente y la puerta cerrarse.
