Capítulo 1.

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–Se caracterizan por el ardor y la pureza con que aman las cosas divinas. Se les conoce como "las flameantes llamas del rayo", "rayos de fuego del amor" o "llamas ardientes" Son espíritus bienaventurados . Pertenecen al orden más alta de la jerarquia más elevada. Los serafines, son ángeles del conocimiento y la sabiduría.

Las clases se volvían mas aburridas y el timbre del receso no tocaba. Todos los alumnos del salón miraban la gran pizarra, mientras que solo una persona mantenía su mirada hacia un pequeño cuaderno sobre su mesa. Lo miraba con tanta chispa en sus ojos que a todo el mundo podría sorprenderle.

–Los serafines son seres que pueden ser vistos solo por quienes son “elevados” a una dimensión superior, es decir, un estado en el que el cielo “se abre para ellos”. –El profesor se detuvo y recorrió todo el lugar con sus ojos. Hasta llegar a un joven con la mirada baja. –¿Aoi, estas prestando atención?

Al oír su nombre se quedó inmovil. Si decía que no, lo reprobarían y si mentía se sentiría mal consigo mismo. Ya que este chico se lo conocía como el "Purito" de la escuela que jamás había metido la pata.

El tiempo se le acababa y sentía todas las miradas de la clase postradas en él.

–Yo... -–Se detuvo.

Un estruendo lo dejo paralizado. Su piel se erizó y notaba como sus manos temblaban. Desvío su mirada hacia sus compañeros para saber si alguien mas había escuchado aquel ruido mientras que al profesor se le acababa la paciencia.

–¡Maestro, Aoi está palido! –Gritó un compañero de su esquina izquierda.

–Es cierto, está temblando. –Alcanzó a oir la voz de una muchacha sentada en frente de él.

–Joder, lleven a Aoi a la enfermería. – Se le caía el sudor por la frente.

La vista de Aoi se nublaba. Sentía tal picazón en la garganta que sería capaz de vomitar todo lo que había comido durante cinco días.

Al ser recostado en una cama no dudo en cerrar los ojos y poco después dormirse esperando conciliar el sueño.

***

–Este chico... ¿Estas seguro? –Una voz masculina llenó la habitación.

–Niño... Despierta... –Otra voz mas dulce entró por los oídos de Aoi haciendo que este se despertara.

Abrió los ojos esperando despertar en el lugar donde se había dormido: La enfermería. Para su sorpresa estaba en una habitación totalmente distinta.

–¿Donde estoy?... –Llevo sus dos manos a la nuca.

La respuesta no tardó. Una persona cabello oscuro apareció frente a sus ojos.

–¿Puedes vernos?... –Los ojos del muchacho se llenaron de asombro. Como cuando te daban el tan esperado regalo de navidad.

Asintió con la cabeza. – ¿Quiénes son ustedes? ¿dónde estoy?

–¡Oh! ¡Puede vernos! –Sonrió un chico de cabello blanco. –¡Mi nombre es Sora!

–Calla Sora. –Un hombre que parecía el mas mayor entró en escena. – Aoi dejanos explicar esto.

Aoi sabía que algo no andaba bien. Despertar en un lugar totalmente diferente con personas que jamas en su vida había visto le llamaba la atención. Necesitaba explicaciones.

–Somos Serafines... –Explico el pelinegro.

•••

Hasta aquí. Como para dar idea (҂⌣̀_⌣́)

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⏰ Última actualización: Oct 31, 2016 ⏰

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Serafines. (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora