Hola, yo soy Bram Stoker, me gusta mucho escribir, es muy divertido, al igual que me gusta pintar y hacer cuadros de pinturas y eso, según yo soy muy creativo, pero no vengo a contarles de mi, vengo a contarles mi historia:
Un día como cualquier otro, estaba yo como siempre sentado en la cama de mi habitación, algo aburrido igual que siempre así que decidí ponerme a escribir una novela o algo así como siempre me gustaba, no encontraba inspiración alguna! Estaba comenzando a desesperarme, Yo! Bram Stoker! No puedo quedarme sin ideas! Eso no es una opción para mi, ya arto, decidí salir a caminar un rato a ver si encontraba alguna inspiración o algo así, estaba pensando en a donde debería ir pero otra vez parecía estar bloqueado! No se me ocurría nada! Hasta que tome mi abrigo y me asomé por la ventana de mi casa y ahí estaba! Una bella mujer! Era verdaderamente hermosa! Era alta, de tez blanca, delgada y con un hermoso cabello negro largo, quise salir detrás de ella y averiguar si me daría una oportunidad esa bella mujer, corrí tras ella intentando verme casual, llegue hasta donde estaba ella y no se me ocurrió más que saludarla:-Hola- dije con una sonrisa en mi rostro- me llamó Bram, Bram Stoker, ¿y tu?
-Lilith- dijo fría,sin una seña o sonrisa como la mía en su rostro, como si no le importara nuestro encuentro-
-Mucho gusto Lilith, es extraño encontrar mujeres tan lindas aquí,en Italia, ¿tu eres de aquí?- pregunté ella se detuvo por unos segundos ya que íbamos caminando, con la misma frialdad de hace un rato me contesto-
-No, yo... yo vivo en muchos lugares, lugares apartados de aquí, es mi primera visita, casi siempre me gusta alojarme en bosques- me sorprendió escuchar eso-
-O ya veo, y ¿cuanto tiempo vas a quedarte?-le pregunte y voltee a verla pero por alguna razón extraña no me dejó ve su rostro-
-El tiempo que sea necesario... tengo toda la eternidad...-¿que acaba de decir? Hay por Dios está esta asustandome-,
-¿Como? ¿toda la eternidad? -dije asustado y tartamudeando un poco-
-¿Estas asustado?- me pregunto sin dejar de ver hacia en frente como había ido todo el camino-
-Solo un poco, es que esto me parece un tanto...extraño- ella se detuvo en seco otra vez pero esta vez se giró hacia mi, pude ver su bello rostro pero me sorprendió el ver que sus ojos habían cambiado de color azul a un rojo intenso, tal fue mi susto o impresión que me desmalle, cuando desperté no estaba en el bosque que recordaba si no en una casa pero se veía muy antigua, me levanté para salir de ahí pero la vi ahí parada de espaldas a mi
-Lilith, ¿que me pasó? No recuerdo nada más que estábamos en el bosque y... vi tus ojos...-ella se giró y se acercó ami y me dijo-
-Tranquilo, no voy a hacerte daño y lo de mis ojos, tiene una explicación rara pero la tiene -ella me explico todo, desde el día en que nació hasta el día actual y por qué es lo que es-
-Asi que, ¿tienes más de 1000 años?- pregunté curioso a lo cual ella sólo asintio-
-Eso no importa, tu tienes que irte, eres maravilloso y me he enamorado de ti, por eso no quiero hacerte daño así que vete ya!- exclamó, después sólo cerré mis ojos y no supe nada más, no se si fue un sueño pues desperté en la cama en la que empezó todo, desde ese día recuerdo muchísimo a Lilith, quien me enamoro en un abrir y cerrar de ojos, pero lo que más recuerdo es una pintura que estaba en su pared, ella me explico su significado, tengo muy presente ese cuadro, tanto que decidí plasmarlo yo mismo a como lo recordaba, cada color y espacio, desde ese entonces no he podido sacármela de la cabeza y la recuerdo aún más al ver ese cuadro, al ver...El cuadro de Bram Stoker.