Capítulo 3|"Un lío innecesario"

95.9K 7.4K 1.3K
                                    

Abby

Misterios. Ha sido una semana totalmente repleta de ellos.
Para empezar, ¿por qué una patrulla policial se ha estado paseando tan constantemente durante estos días? Al principio no me preocupé mucho, pero ya después fue demasiado notorio. Ni si quiera he podido comentar el tema con mi padre, ya que él parece nunca estar en casa. Él y Katherine salen todas las tardes después de llegar de sus respectivos trabajos y es como si yo viviera sola. Lo cual no me complica del todo; me agrada estar sola, aunque no todo el tiempo. Además, ni siquiera Hunter ha venido. Ayer se me ocurrió la brillante idea de preguntarle al Sr. Nícolas, durante horas de colegio, si acaso algo andaba mal con Hunter, y el viejo maldito no hizo más que ignorarme. A Derek no le visto y Zac mucho menos.

Fei, por su lado, también anda muy misteriosa, pues ha vuelto a sus andanzas de creerse bruja, lo cual me tiene loca, pues me utiliza de conejillo de indias. La última vez me intentó realizar hipnosis, pero no acabó bien. Ahora, me ha pedido que la acompañe donde su amigo Arúna para practicar quién sabe qué otras cosas del demonio. Sólo porque le tengo un enorme cariño no me he negado. ¡Ah! También ella está recibiendo curiosas cartas de una admiradora secreta, claro, yo sí sé quién es, pero no le he dicho nada y tampoco pienso involucrarme. Fei no parece muy interesada, ella dice que aunque le parece un gesto tierno, eso de las cartitas de admiradores psicópatas no va con ella, y me saca en cara que la pscicopafilía va más conmigo, por todo el asunto con Hunter.

Por otro lado, Adam me contó que sus padres regresarán dentro de unos días. Al parecer los ánimos ya van mucho mejor y él también está súper contento de volver a verlos. Hemos vuelto a ser buenos amigos, es tan extraño... ¡pero, adorable! Él y yo compartimos el secreto de Georgina y junto a ella, somos los tres bastante confiables ahora. Tanto así que se nos ha vuelto típico juntarnos un viernes en la casa de alguno a ver una película y comer. Hasta el momento ha sido siempre en el departamento de Leo, donde Adam también vive. Leo es bastante amigable y su complicidad con Adam me hace desear verlos dándose un bonito beso. Estoy segura de que si fueran pareja, se ganarían un premio a los más adorables. ¡Es qué son tan lindos! Creo que superan la ternura de mi hermano y Matthew, oh no, no... Aquello es insuperable. Me retracto.

Como decía; tenía una "importante" junta con Fei hoy, donde de seguro acabaría sufriendo. Fuimos, después de clases, a la típica casita de Arúna, dónde él amable como era lo usual, nos recibió.

Habían unas diez tacitas de té miniatura sobre una mesilla. Arúna nos dijo que podíamos servirnos si queríamos y yo, toda curiosa y medio confundida por la pequeñísima cantidad de té que contenía cada tacita, escogí aquella que llevaba una etiqueta roja. Fei, por su parte, no tomó ninguna de ellas, sino que escogió una taza mucho más grande que se encontraba sobre otra mesita.

ᅳAbby, ¿qué has bebido?

Acabé de tragar el sorbo diminuto que comprendía a la totalidad de mi té y respondí. A lo que Fei y Arúna quedaron observándome con expresión de emojis sorprendidos.

ᅳSeñorita, usted... No, no, ¿cuál etiqueta ha escogido?

Me sentí como una niña pequeña que había cometido una travesura. Avergonzada señalé la tacita roja y los ojos de Arúna se abrieron como platos.

ᅳEse era un afrodisiacoᅳdijo con voz incómodaᅳ, y uno muy potente, por cierto.

Entendía que era eso. Jamás había utilizado uno, pero la cantidad que había bebido parecía muy mínima como para provocar un gran impacto. Además, hasta el momento me encontraba en excelentes condiciones.

ᅳ¡Ahg...! Abby... ᅳdijo Fei, con evidente actitud de regañoᅳ, ¿me la tendré que llevar a casa, verdad, Arúna?

ᅳSería lo ideal. Pueden volver otro día, si gustan.

Por SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora