Presente.

12.Espero el tiempo que sea necesario.

¿Cómo qué nos habíamos quedado encerrados?

-¿Pero qué dices? A ver, quita, eres demasiado torpe-. Río leve e intento abrir, pero efectivamente, nos habíamos quedado encerrados-. Seguro que has hecho esto a posta-.

-Claro que sí, no tengo otra cosa que hacer que encerrarnos aquí dentro-.

-Pues sí, no me sorprendería-. Me cruzo de brazos y suspiro-.Tenemos que salir de aquí-.

-Sé como salir de aquí, pero solo lo haré si me concedes una cita, solo una, no te pido más-.

-Evans, te he dicho que estoy enfadada contigo joder, no quiero tener una cita contigo, no me apetece saber nada de ti-.

-No sabes si lo pasarás bien-.

Suspiro-. Si acepto esa "cita", ¿me dejarás en paz?-.

-Te dejaré en paz solo si quieres, aunque dudo que me lo pidas Simons-. Sonrío de lado-.

-Solo hago eso para poder salir de aquí, no lo olvides-.

-Hazlo por lo que quieras, pero he conseguido una cita contigo-. Sonríe de lado y empuja la puerta con fuerza abriéndola rápidamente-.

Por una vez la suerte estaba a mi favor, no había nadie en los pasillos, aunque faltaba muy poco para que sonora el timbre, por lo que debía darme prisa al salir, pero como no, Thomas me había cogido de la muñeca.

-Te recogeré el viernes a las 7, ¿te parece bien?-.

-Mm, no sé si estaré ocupada, si no abro la puerta de mi casa significará que lo estoy, y recuerda, no insistas-.Río-.

-Preciosa, esa será nuestra noche, solo para nosotros dos, no me rendiré hasta que no estés conmigo-.

No podía evitarlo, sonreí como una tonta y después me fui, creo que...que Thomas me gusta, y no sé si es lo correcto, no después de...todo lo que ha pasado, pero tendré que esperar al viernes para saber si estoy haciendo lo correcto.

Era viernes, no sabía que los días podían pasar tan rápidos.
Sentí un pequeño escalofrío cuando escuché el timbre, bajé rápidamente y abrí la puerta. Estaba realmente guapo.

-Wow Malla, estás muy guapa-.Sonríe ampliamente y me da una rosa roja-.

Cojo la rosa sonriente y la huelo-. Muchas gracias, es una de mis flores favoritas-.La dejo dentro y cierro la puerta-. ¿Y tu moto?-.

-Hoy no nos hará falta-.Sonríe ampliamente-.

-¿Me vas a hacer andar mucho?-.

Se para en medio de la cera y se gira hacia mi para mirarme directamente a los ojos-.Eres tan ingenua-.Sonríe y se acerca a mi-. ¿No te das cuenta de qué cuanto más te resistes y más borde eres más me gustas? Dios, eres tan jodidamente hermosa-.Dice sin quitar la mirada de mi.-

Río y lo miro-. Eres y seŕas un imbécil, me gusta que insistan, así que...tendrás que esperar-.

-Por ti, espero el tiempo que sea necesario-.