-Hermana... ¿Estás segura de esto?
-Por supuesto hermanita. ¿No las escuchaste acaso? Dicen que fue un caso excepcional nuestra llegada aquí.- Seguí sacando más y más papeles.- Quizá tenga que ver con papá o mamá. En alguna carpeta debe decir algo sobre nosotras.
Recuerdo que aprovechando la ausencia de la directora del orfanato, Anne y yo logramos entrar a su oficina para quizá encontrar el nombre o foto de nuestros padres. Sabía que el desorden que dejábamos nos delataría, pero si conseguimos aquellos nombres, valdrá la pena cualquier llamada de atención que recibamos... Aunque Anne haya sido obligada por mí a hacer esto.
Jamás pensé que aquel día cambiaría el rumbo de mi vida...
-¡Bingo!- En medio de papeles inservibles y viejas fotos, logré encontrar un sobre que tenía nuestro nombre junto a unos números que señalaban la fecha de donde provenían.- Anne, deja eso y ven. ¡Rápido!
Anne soltó los papeles que tenía al escuchar mi primer grito, quería recogerlos pero el tiempo ahora vale oro.
-Seis de...
-Doce de Diciembre de 1986. El día que llegamos.- Abrí el sobre y sacaba la primera hoja que había allí. Anne seguía atenta a lo que hacía.-
-Eso fue hace... ¡10 años!
-Exacto.- Empecé a descifrar los garabatos de adultos que había en las hojas. Desde las más llamativas hasta las más sutiles.- Según esto fue un viernes...
Seguía revisando cada hoja que salía de aquella carpeta. Habían muchos papeles, fotos de nosotras y otras cosas.- Llegamos cuando tenía aproximadamente 3 años y tú apenas 1 año.
-¿Osea que tengo 12 y no 11 como me hacen creer?
-Y yo 14 y no 13. Hemos sido engañadas todo este tiempo.- Anne se rió luego que dije eso con un tono burlón.
-¿Qué otros secretos podremos descubrir hoy...?- Esta vez reí yo, Anne tenía la voz muy aguda y suave, por lo que sus imitaciones de narrador de televisión eran pésimas.-
-No lo sé.- Seguía buscando, lamentablemente había más y más basura.- Espera. ¿Que es esto?
-¿Que cosa?
Saqué un sobre, se notaba abultado, porque aparte de papeles tenía mas cosas dentro. Dejé la carpeta de donde salió a un lado. Volteé y Anne me miraba con una sonrisa. Ella estaba ansiosa de saber todo sobre nosotras tanto como yo.
-¡Ábrelo ya!- Anne ya no podía esperar más. Decidí romper el sello y procedi a abrirlo.-
-¿Que dice? ¡Dime dime dime dime!
Vi la primera hoja, estaba doblada. Decia 'No abrir hasta que Lina cumpla 18' y parecía tener más parrafos abajo, decidí ponerlo al fondo. Habían varias fotos cortadas. Las saqué para ver.
-Todas están cortadas, en ninguna aparece alguien más que nosotras.- Anne veía las fotos intentando buscar a otras personas que no seamos nosotras. Pero cuando encontrábamos algo, esa parte estaba cortada.- ¿Dónde crees que estén las otras partes de las fotos hermana?
-Son todas las fotos que hay, no hay más. Lo siento.- Bajé la cabeza, Anne debe estar frustrada. Es mi culpa por haberla ilusionada por algo que muy probablemente nunca sabrá.- Oye Anne, de veras...
-No hemos cambiado en nada. Lo bueno de esto es que nos aseguramos que somos hermanas.- Ella me lo decía con una sonrisa, estaba feliz a pesar de todo. Saber que la única familia que tiene está viva y a su lado a diferencia del resto la hacía feliz. Agarró varias fotos y las puso frente a mí para verlas.- Mira, aquí estás tú; yo supongo estaba durmiendo en mi pequeña cuna. Quizá te gustaba la idea de que tendrías con quién jugar todo el tiempo.
-Si, saber que tendría con quién hablar, hacer travesuras, pasear... Me encantaba.- En realidad no recuerdo nada de cuando tomaron esa foto. No recuerdo nada acerca del nacimiento de Anne. Era muy pequeña quizá. No recuerdo nada acerca de mis padres. No recuerdo nada de mí.- Anne, gracias por intentar animarme como siempre.
-Estamos para ayudarnos. ¿Y si sacas todo lo del sobre?
-Lo haré.
Agarré el sobre y vacié el contenido en el suelo. Cayeron hojas, la hoja doblada de hace un rato y una pequeña cajita. Mientras Anne se aseguraba de que no había nada más en el sobre, yo guardaba la hoja doblada en mi bolsillo.
-Cuántas hojas... Y no dicen nada importante.- Anne veía hoja por hoja. Yo estaba empezando a sudar. Quizá sea los nervios, debemos apurarnos. La directora nos dará un gran regaño si nos ve aquí.- Lin... ¿Esa caja que tiene?
-No lo sé, averigüemoslo.- Apenas agarré la cajita, solté un grito y la solté de inmediato. No sé que sucedió pero esa pequeña cosa era muy caliente, como si estuviera tocando fuego.-
-¿¡Que sucedió!?-Anne se sobresaltó con la escena que había hecho.- Lina... ¿Estás bien?
-Si, no fue nada.- Mentí, por primera vez en mi vida le mentía a mi pequeña hermana.-
Y desde allí todo se volvió mentiras...
-¿Que tendrá esta pequeña cajita...?- Anne lo tenía entre sus manos, no le hacía nada. ¿Por qué?- Mira, son muy bonitos.
Anne me mostró lo que había adentro. Eran un par de joyas. Eran collares. Uno era verde y el otro negro. ¿Acaso eso pudo quemarme?
Sí, eso fue...
-¿Son bonitos no hermana?
-Anne, ¿no sientes que te hacen algo?
-No, son simples objetos hermana.- Anne movía ambos collares frente a mí como si moviera pescados frente a un gato.- ¿Acaso no los quieres?, yo si me pondré uno.
-Anne...- Voltee rápidamente antes de terminar esa oración, a lo lejos escuchaba una puerta cerrarse. Debe ser la directora, llegó muy pronto.- Anne, debemos...
Me callé. El dolor era tan fuerte que me paralizó. No podía ni gritar, sentía mi garganta quemarse. Al querer agarrar mi cuello, sentía mis manos quemarse también. Anne me había puesto el collar que tenía entre sus manos hacía un momento. Ahora, ella me miraba con terror mientras yo intentaba quitarme el collar con las últimas fuerzas que sentía que me quedaba.
-Lin... ¡LINA! ¿¡QUÉ SUCCEDE!?...
Fue lo último que escuché. Mis ojos se cerraron involuntariamente no sin antes ver a mi pequeña hermana retroceder asustada no de mí, sino de algo mucho más grande que no alcanzaba a ver.
Y así comenzó mi tortuosa vida...
ESTÁS LEYENDO
Untitled (En edición) (En re estructuración)
ParanormalMi nombre es Lina, o eso es lo que dicen todos. Desde que tengo memoria, vivía feliz entre los que como yo eran huérfanos. Todo eso cambió un día cuando descubrí qué era realmente. Sabía que no encajaría en ningún lugar, y mi muerte la buscaban much...