7 de Julio/ 1900: Hoy es mi cumpleaños número 14, ha sido el día más monótono de mi vida.
8 de julio/1900: Mis padres acaban de informarme que me casarán en tres años con el hijo mayor de su gran socio Sebastián Smith. Su hijo es un joven regordete y caprichoso. Odio esto, simplemente no quiero casarme con alguien al cual casi ni conozco y aun así, sin casi conocerlo ya lo odio.
10 de julio/1900: Hoy por fin encontré una amiga, me siento tan feliz al poder compartir mis pensamientos reales con alguien que realmente me entiende.
22 de julio/1900: Julieta, este es su nombre y tiene la misma edad mia, ella siempre ostenta una enorme pero hermosa cabellera rizada oscura que le llega hasta la cintura, sus ojos son grandes, oscuros y lustrosos, su rostro perfectamente formado, su piel tan delicada y hermosa...
20 de agosto/1900: Es increíble que una persona que jamás pensaste que te ibas a encontrar en tu vida, aparezca casi de la nada, en el momento menos esperado, en el momento en el que necesitas aunque sea un poco de comprensión. Julieta era ese tipo de ser perfecto, ella era tan crítica, tan sistemática, tan agradable y... Tan bella en la esencia de todo su ser.
1 de septiembre/1900: Amo pasar el tiempo con Julieta, los momentos que paso junto a ella son amenos, divertidos y entretenidos.
-Odio no poder tomar mis decisiones libremente y con amor, sin que esto sea visto como una transgresión- Dijo Julieta.
Ella se veía tan radiante ante la luz del atardecer, me volteó a mirar, amo su mirada, es como si dentro de ella escondiera un mar en medio del anochecer, pero un mar aun no descubierto, un mar con miles de cosas dentro de él por descubrir.
-No me conformo que mis padres planeen mi matrimonio-Dijo Julieta- no quiero ser la sirvienta de nadie más, para mí es más como si me pusieran en venta ante el que más dé.
-¿Aunque por desobedecer al matrimonio, te fusilen por obedecer al amor?
-Vivimos en una realidad bastante cruda.
25 de septiembre/1900: Quisiera que el amor desenfrenado que siento por esta hermosa amistad no acabara nunca, Julieta es más que una mejor amiga, ella es un hermoso ángel enviado por Dios.
8 de octubre/1900: Hoy a sido el día más extraño y encantador de toda mi vida. Es extraño porque nunca antes pensé en besar a alguien y que este alguien me besara a mí con tanta pasión, y encantador, porque este momento fue cuando experimenté la felicidad mas extrema en todo el universo, por primera vez en mucho tiempo me sentí amada e importante para alguien más.
30 de octubre/1900: Julieta ya estaba lista para enfrentar a sus padres, para decirles lo crueles que eran al no dejarla escoger sus propias decisiones y para aclararles que ya había encontrado el amor y con el cual quería compartir el resto de su vida. Yo, por mi parte, no me sentía segura a discutirlo con mis padres. Oh, que tal si en un ataque de desprecio me dejan a mi propia suerte. Tengo mucho miedo, no quiero que le pase algo malo a Julieta, me moriría si algo malo llegase a pasarle.
10 de noviembre/1900: Un día por la tarde cuando Julieta por fin pudo salir de su casa, me buscó y esto fue lo que me dijo:
-Agnes, escapémonos, Vayámonos, formemos una vida nueva con nuestras propias reglas, será un futuro maravilloso, imagínate-lo, tú y yo.
-¿Qué? Es una locura, nunca podremos hacerlo.
- Claro que si, Agnes mira, no sabremos si es imposible si no lo intentamos, oh mi amada, no quiero estar mas aquí, mis padres me obligan a casarme con un viejo asqueroso y si no me largo ya, me dejarán encerrada en mi casa hasta el día de mi casamiento.
-Pero ¿cómo vamos a sobrevivir?
-No importa -dijo Julieta- hagamos el primer paso...
-Julieta, no estás pensando, hacer esto no es tan fácil, acaso no te das de cuenta que si nos llegan a encontrar nos matarán.
-Oh, Agnes – dijo Julieta- quisiera que todo fuera más fácil, quisiera poder ser yo la que controle mi vida, quiero tantas cosas que por lo visto son imposibles -esto último lo dijo con una lagrima cayéndole por la mejilla- Agnes si me llagaran a matar por escaparme con la persona que más amo en este mundo, no moriría infeliz, por lo contrario, moriría sabiendo que por lo menos hice algo que quería hacer, estar junto a ti una vez más.
1 de enero/1901: No he parado de llorar, no he parado de pensar en ese momento, fue el momento más cruel de mi vida, me siento horrible... Julieta me convenció de escaparme con ella, oh Dios mío, tuve tanto miedo pero me sentía tan segura al lado de ella. Esa misma noche nos fuimos, después de coger el tren, Julieta quiso que fuéramos a un desierto cercano, no se si pueda describir lo radiante que estaba en ese momento, simplemente hermosa y feliz... Nos acostamos y comenzamos a observar el oscuro azul del cielo junto a sus brillantes estrellas, en ese momento fui la mujer más feliz de todo el planeta. Comenzamos a recordar el día en que nos conocimos: Yo estaba como siempre sola y triste sentada en el banco del parque, fue ahí cuando Julieta apareció y me saludó.
-En ese día que nos conocimos, te veías tan hermosa pero tan sola y triste, y yo que esperaba con tantas ansias a una amiga...-dijo Julieta- se podía ver que tus ojos estaban guardando un mar de lágrimas.
-Si, Julieta, me sentía miserable, hasta que llegaste tú, desde este momento alegraste cada uno de mis días. -dije, en ese instante Julieta me comenzó a consentir mi mano y luego mi mejilla.
-Este mundo cruel está invadido de escorias del infierno, pero también, hay querubines hermosos, como tú, por ejemplo. – dijo Julieta.
Esa misma noche nos quedamos dormidas, en medio del desierto, dormir junto a ella fue la cosa mas bonita. Me sentí libre, esa noche me di el placer de soñar cosas hermosas junto a ella... Las cosas se complicaron unos días después, cuando nos veíamos obligadas a escapar de todas partes, fue ahí cuando nos encontraron... Se llevaron a Julieta... y a mi me recogió mi padre, que gracias a su grandes influencias no dejó que me ajusticiaran. Pero los padres de Julieta, mi amada, la dejaron a su suerte... Le rogué a mi padre que me dejara, no podía imaginarme una vida sin ella... pero no cedió y me llevó a una nueva casa que había adquirido recientemente en la cuidad de Botágo, allí me dejó hasta recibir la noticia de la muerte de mi querida Julieta...
8 de Julio/1903:El día de mi boda, no dejé de pensar en las aspiraciones que tenía con mi querida Julieta, cuando dije el "si acepto", vi a Julieta en frente de mi, estaba demasiado bella, radiante, con sus deleitantes ojos oscuros y una sonrisa encantadora, cuando bese a mi marido, no lo besé a el, si no a mi amada.
