Disaster & Deviant

1 ~ Mudanza ~

Como todas las mañanas de sábado desperte al rededor de las 10:30am, el silencio de mi aura era algo reconfortante, al menos no alterarían mis nervios desde que abrí mis ojos, tomé mi móvil y noté que tenía un mensaje de mi hermano y otro de Emma, mi mejor amiga.

Domm
-estoy en la plaza en práctica de basket, deje tu desayuno en el horno, regreso para el almuerzo-

Lo dejé en visto y abrí el de Emma.

Emma
-cuando despiertes me avisas, vamos de compras, mis padres no están y yo estoy aburrida, cualquier cosa estaré en la cafetería a la cuadra de tu casa♡-

Sonreí y dejé de lado mi móvil, me adentré al baño y al cabo de una hora ya estaba de vuelta en mi pieza buscando que ponerme en mi armario lleno de cosas inservibles, opté por un vestido negro sencillo con un chaleco de jean y Vans negras, dejé mi cabello suelto y solo me coloque un gorro de lana rojo, me maquille como de costumbre con delineador negro y rímel, tomé el movil junto con mi bolsa con dinero y otras cosas.

Al bajar por la escalera las fotografias de la familia colgando de la pared acapararon mi atencion por unos segundos, ahi estaba, la tipiyca fotografía familiar donde mamá luce reluciente e impecable, con su cabello sin un solo cabello rebelde, su maquillaje inmaculado, su manicure perfecto y un vestido sencillo acompañado del collar de perlas rosa que papá le obsequio ñlr su cumpleaños, papá con una sonrisa marcada donde sus hoyuelos hacían acto de presencia, con traje entero en perfecto orden y su corbata al largo indicado, mi hermano y yo vestidos como si fuéramos a una gala de la iglesia luego de la fotografía, -bufé- ¡vaya farza!, como si esa fotografía reflejara la verdad en esta familia.
Termine de bajar y llegué a la planta baja y como de costumbre solo estaba la chica de la limpieza, la casa relucía de limpia y ordenada, sin decir nada salí de casa y en mi bicicleta color chicle tome rumbo al café, en el camino llame a Emma para asegurar su estancia en el local y aún estaba allí así que llegue a prisa.

-hola Emm- besé su mejilla-

-hola dormilona- me sonrió-

-sabes que los sábados son mis días-rei-

-si, si, ahora, comamos algo y vamos de compras, necesito renovar mi guarda ropa, no tengo nada bonito ni funcional-

-reí - ¡bromeas! Tu guarda ropa increíblemente es mas grande que el mío y esta lleno de cosas hermosas, el mío si esta lleno de porquerías que compro por impulso y ya luego ni siquiera utilizo- leí el menú-

- con mucha mas razón necesitamos ir de compras-chillo para luego imitar mi acción-

Después de 10 minutos una chica de apariencia dulce y simpática se acerco a nuestra mesa con una blusa del local y una libreta en mano-

-¿puedo tomar su orden?- dijo con voz dulce-

-yo quiero un café frío de caramelo con crema y un pastel de vainilla- dije con una sonrisa amplia-

-yo quiero un café frío de vainilla y un pastel con caramelo-dijo Emma con brillo en sus ojos-

La chica solo asintió y se llevo los menús yo solo mire acosadora a Emma.

-¿tengo algo en la cara?-

-no que estabas a dieta

-no me arruines la vida __, es fin de semana, me lo merezco-

-Haha ok ok esta bien-

Ambas guardamos silencio por unos minutos para luego romperlo con temas random que nos hacían reír como idiotas y pasar esos momentos que tanto amamos.

Al cabo de 15 minutos las ordenes estaban en la mesa y al cabo de una hora ya habíamos terminado y reposado lo comido, Emma insistió en pagar la cuenta y así salimos del local en busca de nuestras bicicletas, ya luego tomamos rumbo a él centro comercial.

Toda la mañana nos la pasamos de tienda en tienda y aunque antes de entrar jure no comprar nada no lo evite y compré unas cuantas cosas, llamé a John el chofer de la casa para que pasara por los paquetes, total Emma siempre iba a mi casa y pasaba él día en esta los finde, nosotras llegamos rato después en nuestras bicicletas y al entrar a casa me encontré con Dominik y su mejor amigo Jonna.

-¡Hola _!-

-¡Hola Jonna! Que gusto verte por acá-lo salude con un beso en la mejilla-

-bueno, tenía tiempo de no venir y justo después de la práctica Domm me dijo que viniera ya que solo estaban él y tu-

-si, papá y mamá como de costumbre de viaje, hoy Emma vino por la misma razón-sonrei-

-¡Hola Emma! Vaya, la última vez que te vi fue en la fiesta de navidad de hace 2 años-

-lo se, mucho tiempo, se ve que la vida te a tratado bien-se sonrojo-

-se hace lo que se puede-sonrio-

-bueno, bueno, mucho amor y bla bla bla pero la pizza ya esta en la mesa y se va a enfriar, a lavarse las manos y a comer- Domm salio por la puerta de la cocina-

Nos fuimos a lavar las manos como indicó mi hermano y nos sentamos a la mesa a comer entre bromas y temas de todo, nunca imaginé comer mas de 2 rebanadas de pizza pero tenía meses de no probar una por las estúpidas dietas que sigo con Emma, Dominik compro helado y nuevamente pecamos, Emma y yo compartíamos miradas cómplices y a la vez de reproche porque sabíamos que después de comer de esta manera tendríamos que correr mas de lo que ya corremos cada mañana.

2 horas después estábamos en el gran sofá del living escuchando un poco de música y hechando relajo. En medio del alboroto no nos percatamos de la llegada de mis padres, guardamos la cordura un poco y seguimos con la mirada cada movimiento de ellos.

-¡Jonna! ¡Emma! Tanto tiempo, que gusto-dijo mi madre, papá solo sonrió-

-el gusto es nuestro señora Swan- dijo Jonna-

-lo mismo digo- imito Emma-

-bien, me da mucha pena pero necesitamos hablar con nuestros hijos a solas si no es problema, le pediré a John que los lleve a cada quien a su casa- dijo papá con su eterno semblante de seriedad-

Ambos chicos asintieron, se despidieron y salieron de casa, Dominik y _ quedaron con cara de confusión y simplemente prestaron atención a sus padres.

-bueno, tenemos que informarles que nos mudáremos, nos iremos a New York, tenemos asuntos que arreglar en la sucursal de allá y se llevara su tiempo, no podemos dejarlos solos mas de 2 meses por lo que nos irémos todos a vivir allá- papá soltó la información como metralla-

Domm quedo en shock y yo no supe que decir, que hacer, solo me fui a mi alcoba como alma que lleva el diablo sin decir nada azotando mi puerta a mi espalda, me lance a mi cama y en un santiamén las lágrimas mojaron la sábana.