Capítulo 7 - Where You Belong

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Clarke estaba dejando correr el carboncillo por esas hojas en blanco con tanta soltura que parecía volar mientras lo hacía, su rostro denotaba total concentración y el brillo en sus ojos era inigualable, jamás nada ni nadie la habría hecho vibrar de esa forma. Tuvieron que pasar muchos minutos para que quedara totalmente conforme con uno de los tantos bocetos que había creado los últimos días para el gran proyecto que debía presentar en unas semanas.

Cada vez que terminaba satisfecha con su obra debía decidir si lo presentaría en la universidad o si lo guardaría en su colección personal. Algunos de ellos la hacían sentir completamente vulnerable, guardaban sus más profundos deseos, miedos, sueños. No se permitía a sí misma mostrar ese pequeño rincón de su vida.

Cuando se consumía en su propio arte sentía que su cuerpo y mente se cerraban ante todo pensamiento que la alejara de aquella motivación que la movía a crear, pero apenas terminaba, se permitía a sí misma volver a ciertas banalidades, volver al mundo real.

No podía estar más segura, existían dos Lexas. Era imposible que aquella chica sexy de sonrisa y mirada brillantes que se perdían en un libro o disfrutaba de la soledad fuera la misma que se rodeaba de perritos falderos y lujos, esa chica de mirada rodeada de muros y sonrisa burlona.

De alguna forma necesitaba encontrar algo que la justificase ante sí misma, algo que le explicase cómo era posible que la idiota que caminaba por los pasillos con Costia fuera también la chica que se colaba sin permiso alguno por sus pensamientos más sucios y también los más hermosos.

-Lo siento muchísimo Clarke –se asomaba por la habitación de la rubia.

-Raven, la que lo siente soy yo. No debí...

-No, rubia. Tenías razón, tú solo quieres que las cosas estén bien y yo la muy idiota voy y lo arruino todo – los ojos de Raven comenzaron a llenarse de lágrimas.

-Hey cariño, ven aquí –se sentaron juntas en la cama de la rubia y se fundieron en un abrazo. –Te extrañé muchísimo. Pero no te culpes, por favor, exageré demasiado las cosas.

-Han sido los tres peores días de toda mi existencia, lo juro Clarke –y ahí estaba ese tono dramático y lleno de humor, único de Raven.

-Que pesada Raven –rieron.

-Fuimos un par de idiotas.

-Tal para cual ¿no?

-Ya olvidémoslo, tengo algo demasiado importante que decirte. Juro que es de contingencia nacional, rubia. –Clarke abrió los ojos como platos.

-Dime ya o juro que voy a preocuparme.

-Iré a conocer a los padres de Finn –y la rubia soltó un grito de emoción mientras volvía a abrazar a la morena.

-¿Estás de novia y no me lo habías dicho? Te mato Reyes

-Supongo que Finn no es el tipo de chico que le guste llevar nombre a las cosas, pero está bien para mi ¿sabes? Creo que las cosas van muy en serio.

-¿Lo quieres, verdad?

-Como jamás pensé que podría llegar a querer a alguien rubia.

-Hey, para que me pongo celosa.

-Sabes que eres mi niña especial, Clarke –y le besó la mejilla- juro que ese chico me quita el aliento.

-¿Te quiere como tú a él?

-Así parece –dijo mas emocionada de lo que quería sonar.

-¡Más le vale! –rieron juntas.

Love in WarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora