Rosas negras. (Harry Styles-One shoot)

Parte 2.

Me senté en el sofá y a mi móvil llegó un mensaje.

No me decepciones -Mandy

Sonreí de oreja a oreja y me levante corriendo, tenía que empezar con todo, empezando por las rosas negras.

1 mes después...

“¿Está todo, Louis?” pregunté.

“Que sí pesado, ya lo has preguntado cinco veces, calmate, hasta yo volvería contigo si fuera ella, eres muy romántico” se burló Louis.

“Idiota” mascullé.

“¡Te he oído!” escuché a la vez que me caía una bola de papel en la cabeza y Louis reía.

Rodé los ojos y tiré a la basura la bola de papel, cuando quiere, Louis puede llegar a ser muy molesto.

Mi móvil sonó indicandome que tenía un mensaje y corrí a cogerlo.

Estoy en la puerta -Mandy.

Sonreí.

“¿Por esa sonrisa de bobo debo de entender que Mandy está aquí tengo que irme?” preguntó Louis.

“Si”

Louis se levanto y se dirigió hacía la puerta.

“Señorita” la saludó Louis haciendo que ella riera.

Mandy entró en mi casa y cerró la puerta tras ella.

“Wow” dijo viendo todo lo que estuve haciendo este último mes.

Ella cuando compramos esta casa juntos habló de cambiar la decoración y la diseñó, ya que estudiaba diseño de interiores.

Bueno, se dejó el diseño aquí, así que me encargue de remodelar yo la casa justo como ella quería.

El sofá viejo y de color ocre fue cambiado por un sofá beige en forma de L, el suelo de baldosas fue cambiado por un hermoso parqué oscuro, las paredes pintadas de blanco, todos los muebles cambiados y las rosas negras encima de la mesa.

“Lo hiciste” susurró ella con la voz rota.

“Por favor, no llores” supliqué.

Ella se acercó a mi y me abrazo, le correspondí al abrazo con una enorme sonrisa.

“Me encanta, pero no va a bastar esto para que vuelva” susurró.

“Lo sé”

La cogí de la mano y la conducí hacía la parte de arriba totalmente remodelada.

Mientras ella miraba todo entusiasmada yo me escabullí hacía la planta de abajo y corrí a la cocina.

En un momento puse el mantel negro encima de la mesa, el jarrón con rosas negras, los platos, los cubiertos y la comida.

“¿Harry?” su voz se escuchó en las escaleras.

“En la cocina” dije mientras encendía unas velas que acababa de poner.

Mandy entró en la cocina y se llevó las manos a la boca mientras me miraba con los ojos rojos.

“Harry... esto es hermoso” dijo ella abanicándose con una mano mientras algunas lágrimas descendían por sus mejillas.

“Vuelve conmigo, por favor” dije mientras me acercaba a ella.

“Harry...”

“No puedo hacer nada más, soy humano, cometo errores. Mi pasado esta lleno de dolor para ti, pero mi presente esta lleno de dolor para mi, sin ti. Prometo cuidarte como no lo supe hacer, curar cada una de tus heridas, no dejar que vuelvas a un rincón a lamerte tus heridas como un gato asustado, porque ese gato ahora soy yo. Me asusta, me asusta la vida sin ti. Sin ti me da miedo vivir, me convertí en un cobarde. El gran Styles, el chico al que todos conocían por su valentía y por su descaro, se ha convertido en un pequeño cachorrito asustadizo. Nadie nunca pensó que podrían llegar a conquistar mi corazón y mucho menos destrozarlo como hiciste tu, nadie pensó que algún día suplicaría, y aquí me tienes, suplicando por las migajas de tu amor por mi, suplicando por el amor que te quede para mi, suplicando por un poco de amor. Antes lo gritaba por dentro, ahora lo grito por fuera. Te amo. ¿Recuerdas la primera vez que te lo dije?” Mandy cerró los ojos y asintió mientras yo juntaba su frente con la mía y cogía sus manos. “Estábamos en ese campo, te había acompañado porque me parecías muy tierna recogiendo flores para llevárselas a la tumba a tu abuela. Y simplemente, te lo grite. En medio de una de nuestras peleas te grite que te amaba y me fui, pero esa vez, saliste corriendo detrás de mi. Ahora soy yo quien corré detrás de ti” terminé.