Capítulo 2

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*Narra Alba*

Ese dia me levanté con la moral por los cielos. Sonó mi despertador, (una canción de mi ídolo, Melanie Martínez), me desperecé y acaricié a mi gatita Mistery que había venido en cuanto sonó mi alarma para darme los buenos días, como cada mañana. Abrí el armario tras mirar mi bandeja de mensajes (vacía, como de costumbre) y escogí una camiseta negra con un esqueleto dibujado y unos vaqueros blancos. Esa camiseta es lo único de color oscuro que hay en mi armario, asique no fue difícil encontrarla. Me vestí lentamente y recordé que no había cogido sostén. Bueno, ¿que más da? Total, no hay mucho que "sujetar". Terminé mi atuendo con mis converse negras y blancas y fui a la cocina a prepararme el desayuno: un vaso de leche con chocolate (detesto el café). Mientras se calentaba la leche en el microondas, fui al baño a asearme. Me peiné como siempre: Raya al medio y el pelo suelto. No me maquillé nada excepto un poco de gloss rosa en los labios. Me miré al espejo, "bueno, de donde no hay..." Fui a la cocina y eché de comer a Mistery antes de coger el vaso y llevarlo a mi habitación.
-¿Donde estás? ¡Date prisa o llegaremos tarde!- Un mensaje de mi mejor amiga, Soledad. ¡Jo! Tiene razón, son las 8:10 y tenemos que estar en el instituto a y media. Me bebí el desayuno de dos tragos, me puse las gafas y la chaqueta a todo correr, me colgué la mochila y salí a trompicones de casa.
-¡Lenta!
-Si vamos a llegar igual- Dije mientras nos abrazabamos, como cada día. Siempre me dice lo mismo y siempre llegamos a tiempo.
-¿Que haces vestida de negro? ¿Tienes fiebre?- puso una mano en mi frente y reí.
-No- Me sonrojé
-Déjame adivinar, ¿Dani?- Agaché la cabeza- Eso es que si. Bueno, como veas.- Torció la boca, como hace siempre que no está conforme con algo, pero no dijo nada más. 5 minutos después, estábamos en el patio del instituto.
-¿Ves como daba tiempo?
-Mimimimi- me sacó la lengua y me dio un beso en la mejilla. Soledad, a diferencia de mi, es muy extrovertida y muy guapa. Es bajita, como yo, ninguna de las dos llega al metro sesenta, pero ella es un par de centímetros más alta que yo y siempre me está llamando enana. Es pelirroja, no es natural pero como si lo fuera. La he conocido así. Cuando la conocí tenía el pelo casi por la cintura, ahora lo tiene a la altura de los hombros, pero aun asi es preciosa. Tiene la piel muy pálida y un montón de pecas monísimas. A diferencia de mi, ella no lleva gafas y tiene los ojos color chocolate con leche. Es mi mejor amiga desde hace 6 años. No se que haría si la perdiera.
Me cogió la mano y fuimos hasta clase de lengua (nuestra preferida). Al llegar vimos a Dani con la pija de su novia y se me cayó el alma a los pies. Agudicé el oído y escuché que hablaban de mi. Bueno, no exactamente de mi, si no de "un mensaje de un desconocido que le hacia preguntas raras". Casi se quejaba. En ese momento me sentí estúpida por llevar la camiseta de su color preferido. Se besaron.
-No te rayes, o sea. Me tienes a mí y eso es lo que cuenta, o sea.
-Si, pastelito, te tengo a ti. Pero quiero saber qui...- y le cortó con un sonoro y baboso beso que no pude soportar mirar.

Conociendote (Mejorada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora