IV

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I

Te arreglabas para ser la envidia del lugar.

Eras la más hermosa,

Siempre la más singular.

II

Lo que no sabías es que tu pesadilla se hizo realidad.

Allí el se encontraba,

y una chica de rizos rojos,

sus labios iba a robar.

III

Aún más hermosa, aún más singular.

Fue la más bella de todo el lugar.

La envidia corrió por tus venas,

y la fuiste a enfrentar.

IV

Hacia la otra acera trataste de pasar,

pero un camión no viste al caminar.

Una bocina y gritos en el lugar.

V

Dijeron que las ruedas te lograron aplastar,

pero fue la envidia

la que te quiso asesinar.

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