Cambio

Capitulo 3

Me desperté y lo primero que escuche fue una canción hermosa creo que es rock pero esta canción es hermosa no tengo la menor idea de cómo se llama y ya me ha encantado. Me levante fui al baño me di una ducha rápida puesto que hacia frio y me puse una camisa de rayas con unos jeans y unos converse. Cuando iba bajando olía rico y si no estoy mal creo que son pancakes y el solo hecho de imaginármelos se me hace agua la boca.

-buenos días-dije entrando a la cocina

-hey chica ¿cómo dormiste?-

-bien, oye ¿cómo se llama esa canción?-

-¿te gusta?-

-pues amigo si te pregunto es por qué me gusta-

-Stairway to Heaven de Led Zeppelin–

-oh es linda, ¿tú a quien se la dedicarías?-

-tiene que ser alguien muy especial, alguien que no solo compre una escalera al cielo para los dos sino que también compre mi corazón de una manera especial-dijo con la mirada perdida

-tiene que ser muy afortunada-

-si lo sé, y tu ¿qué canción le dedicarías? a alguien así bien especial para ti-

-sinceramente nunca en mi vida me he parado pensar en eso, siempre he estado tan ocupada queriendo ser lo que mis papas querían que fuera y cuándo no lo lograba me sentía como la mierda-

-wow, pero te digo algo, por más ocupados que estés siempre tienes que pensar en ti y tus fantasías-y lo último lo dijo moviendo las cejas pícaramente

-hay pero ¿porque la cagas de esa forma?-dije sentándome en el mueble mientras el estallaba de risas

-joder pero sí que eres graciosa con caras que haces-dijo sentándose a mi lado

-¿porque?-

-es que mira las mejores caras que tienes son la de irritada, vergüenza, confusión, y la que me encanta y además se contagia, es la de risa-

-y tu ¿qué sabes de la de confusión?-

-cuando te quedabas hasta las 3 o 4 de la madrugada leyendo te veía desde la ventana con cara de confusión, o cuando te reías sola que parecías una demente o cuando lloraste con el final de yo antes de ti-

-hay no me lo recuerdes-dije yendo a la cocina para servir el desayuno- mira tú pones la mesa y yo sirvo ok?

-dale-

Luego de discutir que los pancakes tampoco quedaron tan malos, y mis gustos no son puritanos y los de él no son tan satánicos.

-ok tu ganas –

-de que eres un ángel de la pureza caída en mis manos-

-no, que según la canción que escuche hoy tan poco en tan malo el rock-

- es que te digo que no es, malo-dijo subiendo las escaleras- mira cuando estas triste hay canciones que te entienden y te acompañan en el dolor, cuando estas feliz quieres gritarlo a los cuatro vientos con una canción y joder cuando estás enamorado es lo mejor y lo peor-

-estás loco amigo mío-

-¿Loco?

-Si pero te digo algo, las mejores personas lo están-

-ok Alicia, ¿estas lista para contarme lo que pasó?-

-no lo sé, últimamente las personas en las que confié me fallaron-

-mira que te parece hacer algo, me lo cuentas mientras vamos en mi carro, vamos coge tu maleta y baja que yo te alcanzo-

Mientras lo esperaba afuera de la casa me puse a pensar que diablos voy hacer, en el estudio no quiero seguir ya termine el bachillerato y estoy graduada pero donde carajos voy a vivir, él no me puede tener siempre en su casa.

-hay chica vamos- dijo subiendo mi maleta y una maleta a su carro

-¿y esa maleta?-

-vamos a escapar-

-dime que es una broma-

- no, es real, vamos apuesto que con lo me contaste de satisfacer a tus padres no has sacado tiempo para aclarar tus ideas o encontrarte a ti misma- dijo subiendo al carro

-no, pero tampoco voy a huir-dije subiendo al carro

-vamos huye conmigo vamos hacer solo uno, por siempre- dijo tomándome la cara y mirándome directamente a los ojos

-¿qué vamos hacer?-dije angustiada

-por primera vez hacer nosotros mismos- dijo dándome un beso para luego arrancar el carro

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