The Prince [EunHae] ~ Yaoi

Capítulo 14 ~ Buen vecino

Cuando cerré la puerta me di cuenta de que estaba vacía, las luces apagadas y las ventanas cerradas lo indicaban, subí a mi habitación y deje mi bolso en el escritorio que estaba junto a la ventana, me quite mis zapatos y volví a bajar y me dedique hacer los quehaceres de la casa, no sin antes encender el estéreo por supuesto.

A eso de las siete de la tarde termine, estaba completamente empapado en sudor y no olia muy bien que digamos.

Despues de bañarme volví a la cocina y me serví un poco de comida y me sente en el gran sillón de la sala de estar, encendí el televisor y comencé a comer. Apesar de que estaba el televisor encendido y de que estaba comiendo, no estaba prestando atención a ninguna de las 2 cosas, no podia dejar de pensar en Hyukie. Esa manera tan unica que tiene de besar, su sonrisa perfecta, su mirada hipnotizante, su manera de hablar, de caminar, de reír... Su forma tan única de ser. Fue entonces que me di cuenta de lo rápido que me acostumbre a él. Estaba tan concentrado en mis pensamientos que no me di cuenta en que momento deje de comer ni mucho menos en que momento las horas habian pasado tan rápido, fije mi vista en mi arroz con pollo y con asco lo toque ¡PUAJ! ¡ESTABA FRIO!

Me levante y fui a la cocina, guarde la comida en un recipiente con los restos de la comida del día, lo calente un poco en el micro hondas y salí de la casa con el recipiente. A una cuadra de mi casa vivía una pareja de ancianos cuyos hijos los habían abandonado hace años, el señor estaba cerca de los 80 y su mujer igual, ambos estaban muy enfermos y el poco dinero que le enviaba el único de sus hijo que se "interesaba en ellos" lo ultizaba la señora Choi, que es su vecina para comprar las medicinas, entre la comunidad habiamos acordado de alimentarlos, como eramos una comunidad grande no era mucho el esfuerzo que teniamos que hacer, y hoy me tocaba a mi llevarles la cena

- buenas noches señora Kim
- bunas noches - dijo la mujer alegre de verme
- le traje la cena
- oh vaya - la mujer se llevo las manos a las mejillas en a modo de asombro - yo esperaba al señor Cho
- no señora Kim, hoy me tocaba a mi
- oh... Supongo que lo olvide, ya sabes, a esta edad se olvida todo

Las dos entramos a su pequeña casa, yo serví la comida en la pequeña mesa de madera vieja que tenian por comedor y fui a comprar un litro de jugo de manzana, el favorito del señor Kim, tendi su cama y lave los platos sucios. Al terminar me despedi y salí de allí.