Mi mejor amiga Alice, consiguió una beca para estudiar en la universidad de Madrid. Ella estaba muy contenta, lo había esperado toda su vida, aunque estaba muy triste por dejar a su familia en Argentina.
Al día siguiente, en la despedida, ella radiante como nunca antes, tenía un vestido hasta la rodilla de color azul igual que sus ojos, zapatos negros, el cabello suelto que le llegaba hasta la cintura y con esa sonrisa contagiosa, al verla de esa forma me dieron ganas de no dejarla ir. En medio de la fiesta Alice recibió un llamado en el que le avisaban que se había adelantado el vuelo y tenía que viajar en ese mismo momento.
Narra Alice
Al salir de la casa de Tobías, me despedí de él, diciéndole que lo extrañaría, luego de eso comencé a caminar a mi casa ya que vivía bastante cerca.
Al llegar, tomé mis maletas y salí a buscar un taxi, luego de unos minutos apareció uno, al igual que un joven pálido, cabello negro con aspecto de estar perdido, cuando vio que estaba por subirme al taxi me preguntó si lo podía compartir con él ya que era muy difícil encontrar uno a esa hora, terminé aceptado, ya que íbamos al mismo sitio.
Faltaban unas calles para llegar pero comencé a asustarme cuando el auto se desvió del camino, nerviosa le dije al taxista:
-¿Adónde vamos? Este no es el camino al aeropuerto.
El joven me contesta: no te preocupes es para llegar más rápido, luego de eso me cubrió la boca con un pañuelo, comencé a ver nublado y caí en un profundo sueño. Desperté y ya no estaba en el taxi, estaba en un cuarto amarrada a una cama al igual que otras cinco chicas maltratadas.
Unos minutos más tarde, la puerta se abrió, entraron tres hombres y se llevaron a dos de chicas que tenían la apariencia de ser más grandes que yo.
Pasaron los días y las chicas nunca volvieron, de repente vino el joven del taxi, me extendió un celular y me dijo que llamara a alguien para avisar que estaba bien y que no había llamando antes porque había perdido el celular, al único que se me ocurrió llamar fue a Tobias. Le dije lo que le tenía que decir y corté.Narra Tobías
Luego de que Alice llamara, me di cuenta que no se escuchaba alegre como siempre, notaba su voz entrecortada, triste, rápidamente llamé a su familia para avisarle que ella había llamado y que no se encontraba nada bien. Yo la noté diferente.
Narra Alice
Después de la llamada a Tobías me quitaron el celular y me dijeron que me preparara para un largo viaje. Una vez que el joven se fue, lloré sin consuelo al sentir que nunca volvería a ver a mi familia ni a mis amigos.
Antes de partir a EE.UU. me obligaron a llamar a Tobías para decirle que me iba a otro lugar, ya que me había cansado de Madrid; sin que el joven se diera cuenta, en un susurro le dije el lugar a donde me llevaban. Corté la llamada rápidamente y le entregué el celular al joven.
Unas horas más tarde, me metieron en un auto, con una documentación falsa y un boleto de avión. A eso de las 16:30 hs llegamos al aeropuerto. Mientras llamaban para abordar, vi a Tobías con la policía.Narra Tobías
Vimos a Alice y rápidamente dieron la orden de alto, los secuestradores intentando escapar, empezaron a los tiros, me preocupé cuando vi que Alice recibió dos disparos, uno en la espalda y el otro en la pierna.
Al llegar al hospital la atendieron pero no la pudieron salvar y murió.
Han pasado 6 años de lo ocurrido y lo recuerdo como si hubiese sucedido ayer."Un amigo que da consejos
más que amigo es un hermano;
así como tal les digo
que vivan con precaución:
nadie sabe en qué rincón
se oculta el que es su enemigo"