Luego de una larga siesta la ojiazul pudo calmar un poco su enojo, sabía que estaba mal tomar esa actitud y aún más con Beth pero algo dentro de ella la hacia actuar de manera irracional cada vez que los celos la invadían y es que la ojiazul tenía algo claro y es que Beth podía despertar hasta lo más oscuro de ella y sin proponérselo.
Su enamoramiento de niñas con el tiempo se había disipado, no el sentimiento, si no sus acciones. Dejaron de tomarse de la mano como solían hacerlo o recostarse abrazadas a ver películas porque a medida que iban creciendo desarrollaron un gusto más físico la una por la otra y ambas tenían miedo de decirlo en voz alta.
Tenían miedo de que la otra no correspondiera a sus sentimientos y romper su amistad de tantos años, ninguna ya bromeaba con que iban a ser novias o robarse besos, eso era algo que lo perdieron cuando ambas cursaban los 12 años y luego de eso comenzaron el colegio y aunque era difícil de creer eso las separó aún más.-Pensé que nunca despertarías- molesto la castaña a su hija al verla aparecer en la cocina
-Estaba cansada
-Me he dado cuenta de eso- dijo tirando Doritos en un bowl de cristal- guarde tu cena en el refrigerador y mamá Lauren está muy enojada porque no comiste con ella
-Estaba dormida- se excusó mientras robaba un par de Doritos antes de que su madre tomará el bowl entre sus manos y caminara hacia la puerta de cristal que daba al jardín
-Lo sabe pero igual sabes cómo es contigo-río Camila- por cierto Beth está aquí, ella y Lauren están jugando softball con Cameron
-Olvide que vendría- dijo girando los ojos cosa que no pasó Camila por alto
-Alice recuerda quién es Beth en tu vida -le dijo tranquila- no dejes que cosas sin importancia dañen lo que tienes con ella
-Ese es el problema- susurró soltando un enorme suspiro- déjame tomar mi cena y salgo al jardín
-Está bien- respondió Camila entregándola una sonrisa serena y desapareciendo en el enorme jardín, la ojiazul camino hasta el refrigerador y saco su comida para luego meterla en el microondas, Alice río al saber todo lo que su madre le diría cuando la viera comiendo la comida calentada en el aparato y es que si había algo que Lauren no toleraba era que sus hijos tuvieran malas costumbres como comer a deshoras.
Alice tomo su plato y colocó otro bajo este para poder cargarlo hacia el jardín, se sentó en la mesa con sombrilla que estaba a un lado y en donde Camila le daba Doritos a Cameron quien tenía las mejillas coloradas debido al calor y al esfuerzo físico que estaba haciendo.
-Debes doblar un poco más la muñeca cuando vayas a batear y separa un poco más las piernas- explicaba Lauren acomodando a Beth quien estaba de espaldas a ella- cuando la pelota venga hacia ti debes darle lo más fuerte que puedas
-Entendido- Alice no apartaba su mirada de Beth mientras comía de a poco su pasta, La ojiazul tuvo que disimular porque su madre estaba junto a ella y no podía dejar que su mirada transmitiera lo que estaba pensando en ese momento
-Hola mi amor- saludo Lauren cuando se dio cuenta de la presencia de su hija en el jardín
-Hola mamá- dijo si riéndole- hola Beth- dijo algo más forzada cuando está se volteó, la rubia simplemente levanto la cabeza a modo de saludo y siguió concentrada en obtener la posición perfecta para batear
Lauren siguió jugando con Beth lo que resto de la tarde, más de una vez callejón al piso entre risas, Camila y Camerón se les unieron al juego inventándose nuevas reglas que poco o nada que ver tenían que ver con las reales.
-Ven a jugar- llamo Camerón a su hermana- puedes estar en mi equipo
-No gracias- dijo aún sentada en su silla mientras mandaba mensajes a sus mejores amigas
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Into You
FanfictionAlice y Beth ya no son las mismas niñas que solían jugar interminables horas con sus muñecas y disfraces de superhéroes o que solían robarse besos a escondidas de sus madre y pese a que su amor creció al igual que ellas no lo tienen tan fácil como t...