Bakemono no Ko! Kumatetsu:Su Vida Antes de Ser Maestro(+18)

Capitulo 2

A la mañana siguiente, Kumatetsu se levantó un poco tarde y comenzó a levantarse por olfatear un olor delicioso que le daba cosquillas por la nariz—Sniff, sniff...Mmm, qué es ese olor?

Asuna estaba en la cocina—Oh, ya despertaste, el desayuno está casi listo.

—Oh, y que estás preparando?—se levanta del sillón completamente descansado.

—Un delicioso Omelette de queso derretido y carne.

—Uff, ya se me antoja con tan solo olerlo...oye, en realidad el masaje funcionó, me siento con más energía que nunca, en realidad eres bastante buena para esto.

—Que bueno y muchas gracias por el cumplido, ya está listo, espero que te guste.

Kumatetsu se dirige al lava manos y olfatea el aroma una vez más y su estómago gruñía como un animal —lo siento, es por el aroma.

—Descuida, te lo pondré en la mesa y la sopa Miso que también prepare, también quieres unos vegetales, Kumatetsu?

—Sí, no estaría nada mal— se sienta en la mesa esperando su desayuno.

—Aquí tienes, espero y te guste.

–Gracias Asuna— mira detalladamente el platillo que hizo Asuna, cortó un pedazo y lo comió saboreando el Omelette  que Asuna le preparó y se congeló la un poco —Asuna...esto...es...

—No te gustó Kumatetsu?—se sienta con el mismo Omelette que le preparó.

Kumatetsu se quedó callado por unos segundos, se agacha poco a poco temblando un poco y después exclamó —RAAARGH! ESTO ES LO MEJOR QUE EH PROBADO!!!

—En serio? Que bueno que te haya gustado, es una pequeña invención que yo misma prepare.

—Mmh...me encanta...podría acostumbrarme.

—He he he he, sabes, eh revisado el refrigerador y pensé en ir al pueblo a comprar un poco más de comida.

—Qué?— se impactó del susto —Mh, no no, mala idea, no puedo dejar que vayas al pueblo.

—Tranquilo Kumatetsu, ya lo tengo resuelto solamente me disfrazaré de bestia como los demás y nadie sabrá la diferencia.

—Y si tu plan falla? Si te descubren, te enviarán de vuelta a tu mundo —Kumatetsu se sentía algo preocupado, cosa que nunca siente.

—No te preocupes Kumatetsu, voy a estar bien te lo prometo.

Kumatetsu sentía un raro sentimiento extraño que tenía sobre Asuna, nunca en su vida se sentía tan preocupado por una humana como ella. Después de un rato, Hyakushūbō y Tatara vinieron a visitar a Kumatetsu como de costumbre.

—Señorita Asuna, muy buenos días.

—Que tal Kumatetsu, Asuna-San.

—Buenos días muchachos, cómo están?

—Oh, buenos días Hyaku-San, Tatara-San, llegan a tiempo para el desayuno.

—Genial, tengo mucha hambre!—Tatara se sienta en la mesa listo para comer.

—Tatara! No seas maleducado!—Hyakushūbō se dirigía a Asuna —Discúlpalo señorita Asuna.

—No se preocupe Hyaku-San, Tatara-San puede comer lo que se le antojé, usted también si gusta.

—Muchas gracias señorita Asuna.

Los cuatro se mantenían en la mesa platicando y conviviendo bien, Kumatetsu no dejaba de ver a Asuna sonreír junto con Hyakushūbō y Tatara. Después de una hora y media, todos terminaron con su desayuno y Asuna se fue directo al baño mientras que Kumatetsu, Hyakushūbō y Tatara se encuentran afuera.