Samuel
Me encontraba a punto de tomar una decisión bastante compleja, trataba de pensar claramente pero Willy no dejaba de mirarme, esperando una respuesta que aun no tenía. Había pasado un mes desde que me lo había preguntado, la verdad sigo sin entender como me tiene tanta paciencia el chaval.
— Ufff chaval, no entiendo porque te cuesta tanto tomar una decisión.
— ¡¡Joder Willy, que no es tan simple!!
— ¡Esta bien tío! Pero tampoco es para que te pongas así —claro chaval, como no. Me dice de un momento a otro que nos vayamos a vivir juntos otra vez y espera que le conteste en ese momento como si nada—. Mira Samu, si quieres te espero.
-— ¿Harías eso por mi Willy? —¿Se tomaría tantas molestias solo por mi?
— ¡¡Hombre, claro!! Para eso son los amigos ¿No? —si... Amigos... ¿Por que tienes que ser tan tierno y luego tan cortante Willy? He pensado que hasta lo haces a propósito, pero luego recuerdo que es mi Willy del que estoy hablando, y por ello no querrías hacerme daño a propósito... O al menos eso espero... Eso quiero pensar...
— ¡¡Samuel!! —el grito de Willy llamándome me despertó de ese tierno pero triste recuerdo—, ¿Que dices entonces? ¿Estamos juntos en esto o no? —se veía bastante preocupado por lo que yo respondiera, y debo admitirlo, yo también lo estoy. No se que responderle y no quiero decir algo de lo que después me arrepienta—. Samuel necesito una respuesta ya, no te puedo seguir esperando, así que responde ¿Si o no?
Bajé la mirada concentrándome en el poco café que quedaba en la pequeña taza, sentía su mirada que esperaba una respuesta. Aún no estando seguro di un gran suspiro, sujeté la pequeña taza de café, bebí de un sorbo lo que quedaba, tomé aire e hice lo que tan insistentemente me había pedido que hiciera.
— Lo siento compañero, pero esta vez no —sin querer saber lo que me iba a decir me levanté, agarré mi abrigo y comencé a buscar dinero para pagar el café.
—Samuel ... —pasé de Willy y seguí buscando el dinero, cuando lo encontré lo dejé en la mesa y di media vuelta pasa salir de ahí lo antes posible—. ¡Samuel! —escuché sus pasos apresurados siguiéndome, y a los segundos sentí su mano en mi hombro—. ¿Por que te vas? Según yo, esta conversación no ha terminado —estaba muy serio, pocas veces lo había visto de esa manera.
—Pues según yo, esta conversación si terminó. ¿Querías una respuesta Guillermo? Pues ya te la di, ahora déjame en paz.
—¡¿Me puedes decir que cojones te pasa?!—justo en ese momento llegó un chico de unos 20 años que le llamó la atención.
—Disculpen, pero les voy a tener que pedir que se retiren, están causando molestia en el resto de los clientes.—miré alrededor y mucha gente murmuraba en sus pequeñas mesas, no entendían lo que decíamos pero obviamente los gritos de Willy molestaban a la gente.
—Si, discúlpame—le respondió Willy, que estaba un poco rojo de vergüenza. Aproveché que estaba distraído y salí del café prácticamente corriendo—. ¡¡Samuel!! —escuché como me llamaba y salía del café para seguir insistiendo. A lo único que reaccioné fue a quedarme parado sin siquiera voltearme—. Es enserio tío, dime que te pasa—no quise mirarlo ni responder, no por molestarlo o porque estuviera cabreado, sino porque no era capaz de hacer ninguna de las dos cosas. Al final después de un incomodo silencio Willy volvió a hablar—. Samu necesito saber que te pasa, has estado muy extraño desde que te fuiste de la casa. Estas distante y parece que siempre estas pensando en algo... Si tienes algún problema dímelo, o si no quieres decírmelo pero necesitas apoyo solo dime que lo necesitas, siempre contaras conmigo. O si es algo que yo hice mal por favor hablemoslo, porque ya no soporto más el como me tratas.
—¿A que te refieres Willy? -traté de evadir el tema como lo había hecho muchas veces, pero esta vez no lo conseguí.
—¡¡Precisamente a eso me refiero, joder!! Si te molesto y ya no quieres hablarme o verme nunca más ¡¡Dímelo!! Pero no me tengas como un idiota siguiéndote, ¡Me siento como un completo gilipollas! ¡¿Sabes?!—me voltee enfadado, no con él sino que conmigo mismo, porque tenía toda la razón.
—Willy no es que ya no te quiera cerca, lo que pasa es ...—¡¡Joder!! ¡¿Que se supone que tengo que decirle?! "¡¿Willy no me quiero ir a vivir contigo porque me gustas?!"
—¡¿Que?! ¡¿Que coño es lo que pasa?!—se me quedó mirando esperando una respuesta pero yo me quedé en silencio. Sin pensarlo siquiera mi mirada bajó a sus labios, no era el momento ni el lugar pero lo único que quería era besarlo. Esto comenzó a ocurrirme cuando vivíamos juntos, por eso me he distanciado de él, tengo miedo que en algún momento no me pueda controlar y simplemente lo bese. Si eso pasara nunca más me hablaría y eso me dolería demasiado. Por lo mismo me di la vuelta para irme y evitar hacer una tontería, pero al parecer Willy no quería eso, porque me tomó de mi abrigo y me acercó a él—. Samuel por favor dime que te pasa, no quiero que esto siga así. No quiero que nuestra amistad se pierda... Eres como familia para mi, entiende que me pone mal verte así -sin darme cuenta lo tomé de los hombros.
—Willy yo... —iba a besarlo, a confesarle que me gusta, pero por suerte, entré en razón—, estoy algo confundido respecto a mi vida, a lo que voy a hacer con ella en un futuro, me cuestiono si lo que hago en la actualidad está bien —vaya cantidad de tonterías estoy hablando.
— Samu... Lo siento, yo no tenía idea —de pronto su rostro se relajó.
—Chiqui, no te sientas mal ¿vale? fue culpa mía por no hablar con nadie—hice una pausa, sintiéndome mal por mentirle y por haberlo preocupado—. Lamento mucho haberte preocupado Willy, enserio.
—Descuida —sonrió y por reflejo sonreí también, me pone feliz verlo alegre y contento tal como es—. Realmente estoy feliz de que el problema no sea yo.
— ¿Que va? Claro que tu no eres el problema chaval —de hecho si que lo es, pero no en un mal sentido—. ¿Sabes? ahora que lo reconsidero creo que no sería tan malo volver a vivir juntos.
—Sabía que no podías vivir sin mi Samu.
—¿¡Que va chaval?!, ¡¡si eras tu el que me estaba rogando que aceptara!!
—¡Claro! Porque si te dejo aquí en Los Ángeles mueres, y yo soy muy buena persona para dejarte morir —y entonces comenzamos a carcajearnos por la tontería que acababa de decir Willy, aunque una cosa de lo que acaba de decir es cierta, es muy buena persona. Justo ahora dijo esa estupidez solo para hacerme reír, me doy cuenta cuando lo hace, es una de las cosas que adoro de él—. ¿Entonces? ¿Estamos juntos en esto compañero?.
—¡Claro que si compañero! ¡¡A España se ha dicho!!—tal vez no sea la mejor de las ideas, porque probablemente en varias ocasiones la pase mal, pero prefiero pasarla mal yo a que la pase mal mi Willy.
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La Distancia Nos Unió [wigetta]
Randomalejarme de ti era lo mejor que podía hacer, no quería complicar las cosas o perder nuestra amistad por estos... pensamientos que comenzaron a aparecer en mi cabeza sobre ti... nunca esperé que llegáramos tan lejos, nunca esperé que alejarme de ti i...