Introducción

224 19 1
                                    

Mi nombre es Kim Ki Bum, pero mis amigos suelen decirme Key, dicen que suelo abrir mi corazón y el de otras personas... no sé realmente si sea así, pero puedo asegurarles que tengo muchos amigos...

Tengo 19 años, estoy estudiando el segundo semestre en la universidad, comparto mi dormitorio con otro chico, también en el mismo grado, aunque es unos meses menor que yo, él tiene 18 años, su nombre es Lee Tae Min...

Nos conocimos aquí en la universidad, pero en pocos meses nos hemos convertidos en muy buenos amigos, aunque él es muy inocente y me preocupa un poco... sobre todo por que sé que le gusta el mejor amigo de... mi ex novio...

Si, no les había comentado, soy gay, y acabo de terminar una relación de un año, ¿porqué? Porqué lo descubrí engañándome con otro...

Las clases han terminado el día de hoy, estoy frente a la puerta de mi dormitorio, respiro hondo antes de entrar... éstos días han sido un poco pesados, no me siento con muchos ánimos de acudir a clases, pero no voy pasarme todo el día acostado en la cama llorando porque me pusieron los cuernos...

Abro la puerta... Tae está colocando algo sobre mi escritorio, en cuanto escucha la puerta se hace a un lado y me deja ver un jarrón con rosas rojas...

-¿Otra vez?...- pregunto un poco cansado...

-Sí... a que son muy lindas?...- hago una mueca...

-Sí, lo son... pero ya te dije que no recibas nada por mí...-

Camino hasta mi closet para guardar mi chaqueta, ignoro el jarrón sobre mi escritorio, busco ropa cómoda para dormir y empiezo a cambiarme... Tae sigue parado junto al escritorio...

-Key... ¿en serio no lo vas a perdonar?...-

-¿De que hablas?...- intento hacerme el loco... no quiero hablar de eso...

-Tu sabes de qué hablo... ¿no piensas perdonar a Jong Hyun?...- en cuanto escucho su nombre me quedo quieto un momento... aún me duele... sólo ha pasado una semana...

Siento un nudo en la garganta... paso saliva con dificultad, termino de cambiarme de ropa... tomo un libro y me recuesto en mi cama...

-Key...- vuelve a insistirme...

-¿Qué?...- intento concentrarme en el libro...

-Min Ho dice que el pobre no ha podido ni dormir... está afectando en su desempeño en el equipo de fútbol...- aprieto los labios... escuchar eso me hace vacilar un poco... no me gusta saber que se está descuidando... pero aún así no puedo perdonarlo...

-Él se lo buscó...- contesto...- además...- volteo a verlo...- ya te dije que no me agrada que te la pases siguiendo a Min Ho...- lo regaño...

-No lo estoy siguiendo... somos amigos...- levanto una ceja... él sabe que no le creo...- ash... bueno ya... mejor me voy a dormir...- se da la media vuelta y se mete a su cama...

Observo como se tapa hasta la cabeza... respiro hondo, cierro el libro y me meto bajo las sábanas... rayos! Las flores están justo frente a mí... no me dejan relajarme para dormir, así que giro en la cama para quedar frente a la pared... solo así puedo conciliar el sueño...

Aunque mis sueños no son muy reconfortantes realmente, lo cierto es que todo es muy reciente, aún mi corazón siente algo por él; cada vez que lo mencionan y me lo recuerdan, siento un inmenso dolor en mi pecho.

Si las cosas hubieran sido diferentes, no me sentiría de esta manera, sino hubieran terminado temprano mis clases, sino hubiera decidido ir a buscarlo a su dormitorio, tal vez, si hubiera llegado tan solo unos segundos más tarde.

Quiero odiarlo, pero no puedo, así que he intentado olvidarlo, pero me lo ha hecho casi imposible; desde ese día no ha dejado de enviar notas, mensajes, flores, regalos que siempre terminan en el bote de basura.

Lo que es peor, tiene de aliado a mi compañero de habitación, quisiera poder aliviar un poco el dolor de mi corazón.

ReplayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora