cap. 1

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Ella debió ser mía, maldito bastardo - un disparo se oyó desde la habitación de mi, mi nana me abrazaba muy fuerte mientras veía recorrer lágrimas por sus mejillas, en ese instante un hombre con terno negro ingresó en la habitación donde nos encontrábamos agarrando a mi nana del brazo, yo solo observaba no entendía nada de lo que ocurría tan solo
_no toque a la niña - rogaba ella, mientras el hombre la sacaba a jalones - por favor te suplico que no toque a la niña
Y otro disparo mas, quedando todo en absoluto silencio, unos pasos sonaban cada vez mas cerca, otro hombre con terno gris apareció en la habitación, llevaba un arma en la mano, se acercaba lentamente observandome, se puso de cuclillas
_eres hermosa igual que tu madre - muy sonriente
_señor que haremos con la niña - el hombre de negro parecía  nervioso - desaste de ella, pero no aquí
el hombre me levantó en sus brazos llevandome fuera de la casa, llovía muy fuerte aquella noche, me observaba muy nervioso como si lo estuvieran obligando a hacer esto, entonces sacó un arma que tenia en la cintura y apretó el gatillo
Desperté con lágrimas, sudaba demasiado, mis latidos eran rápidos, ya habían pasado trece años desde aquel hecho, las pesadillas siempre seguían, me levanté dirigiendome a la cocina, me serví un vaso con agua y volví a mi habitación, me paré en mi ventana observando la luna llena mientras tomaba el agua, volvi a mi cama y me acosté quedando nuevamente dormida     

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