Conejito ;; seho ☁

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《4》
Auxilio

Sehun se levantó al sentir un peso encima suyo, ese inconfundible aroma a vainilla y semillas; si, era Junmyeon. Sin abrir aun los ojos paso su brazo por la cintura de el conejito apegándolo a él puesto que le encantaba cuando este llegaba y lo despertaba de aquella manera siendo su lado humano claro ya que hubo una vez donde unos picudos bigotes le picaron la mejilla y por instinto golpeo aquello sin darse cuenta que era Junmyeon y desde entonces quedo prohibido despertarlo si estaba en su forma de conejo, podría llegar a aplastarlo y no quería eso.

- Papi. Despierta Suho tiene hambre. -

Y al escuchar la simple palabra "Papi" los recuerdos de la noche anterior le llegaron a la mente, oh joder, había llevado su relación de "padre" más allá de lo esperado, había tocado sus partes personales y después se había tocado a si mismo pensando en lo que había hecho, ¿Qué clase de padre le hacía eso a su hijo? Oh no, si Irene se enteraba lo iba a matar de eso no había duda. Abrió sus ojos encontrándose con los de su conejito los cuales lo miraban atentamente y estaban bien abiertos, aun se miraba adormilado, sus mejillas estaban sonrojadas como todas las mañanas al igual que sus labios, rojos carmín. De repente le surgió la curiosidad de "¿A que sabrán sus labios? Se la pasa comiendo semillas...y si...No..no puedes pensar así de tu bebé." Sus pensamientos iban variando en cada segundo que pasaba analizando su rostro; esas tiernas facciones que lo caracterizaban. ¿Por qué actuaba como si nada hubiera pasado? ¡Lo había tocado! Y actuaba como si nada, a veces la inocencia de Suho lo sacaba de onda, había cosas que aún no entendía y Sehun no se había dado el tiempo de explicárselas. Las imágenes de la noche anterior llegaron a su mente; Junmyeon sudado gimiendo y pidiendo por mas, una imagen que sin duda lo volvía loco, y no solo a él sino a cierto amiguito suyo.

Después de un momento Sehun mando a Junmyeon a bañarse mientras que el batallaba para dejar de pensar en hacer cosas sucias con su bebé, no podía, tenía novia y la amaba, Suho solo era su bebé y nada más.

Desayunaron en silencio algo un poco extraño en ellos ya que normalmente Junmyeon se la pasaba hablando de lo genial que era Darth Vader y que quería ser como el pero esta vez no. El camino hacia la escuela también fue silencioso algo un poco molesto para Sehun ya que estaba demasiado acostumbrado a oír al conejito parlotear y al llegar al estacionamiento de la misma Suho quito el seguro y estaba por salir cuando Sehun tomó su antebrazo deteniéndolo.

- ¿Pasa algo papi?

Junmyeon tenía una voz digna de un ángel, tan pura y hermosa.

-Dime tu cariño, estás muy callado. - No le gustaba, no le gustaba que Junmyeon fuera callado con él, ellos se contaban todo a todas horas y esta vez fue diferente y temía que siguiera simplemente por el hecho de lo que había pasado la noche anterior aunque ninguno había tocado el tema necesitaba hablar de ello.