No te enamores de mí.

Capítulo 7:Yo estaré para ti.

-¿Podrías dejar de hacer eso? Es molesto–Dije somnolienta.

-Perdón,pero has estado bastante pensativa.Y pensar para ti ya es raro eh–Tomó su barbilla pensativo.

-Eres un idiota,Troy–Rodé los ojos.

-Un idiota con bonitos cachetes–Tomó sus mejillas entre sus dedos apachurrandólos.

-Eso no es cierto,tus cachetes parecen a los de una ardilla–Me miró ofendido.

-Una ardilla muy tierna–Se cruzó de brazos–Y sexy por cierto–Movió sus cejas de arriba hacia abajo.

-Eres un caso perdido–Reímos.Mi celular comenzó a sonar–Espera un momento.

Salí del aula para poder contestar.
Era él,el mismo número de ayer.

-¿Y ahora que carajo quieres?

-Más vale que vayas calmando tu tonito conmigo,bonita–Rió pesadamente–Sólo llamaba para preguntar si ya conseguiste el collar.

-Ah,sí.Eso...emm,no.Pero seguiré buscando–Después de haber leído esa carta ayer no quise seguir buscando más–Si lo encuentro te aviso,hasta luego.

Colgué sin esperar respuesta de su parte y me dirigí al salón con Troy,pero él ya no estaba.Giré en mis talones y me sobresalté al ver a Joshua detrás de mí.

-¿Es qué acaso quieres matarme de un susto?–Abrí los ojos como platos.

-No era mi intensión,lo siento–Bajó su cabeza avergonzado.

-¡Tus cachetitos rojos como un tomate son tan lindos y tiernos!–Los tomé entre mis manos.

-¡Oye!,¿Por qué sus cahetes si te parecen lindos y los míos no?–Hizo un puchero.

-Ya te dije que los tuyos no son lindos,Troy.

-¿Sabes qué? ¡Quiero el divorcio!
–Movió sus manos exageradamente y se marchó corriendo.

-Es demaciado ridículo–Reímos.

-Por cierto,feliz cumpleaños–Me abrazó y acomodó sus lentes.

-Gracias Joshua,eres el primero que me felicita–Sonreí tristemente.

-¿El primero,segura?–Asentí–¿Ni tus padres?–Mi sonrisa se borró al instante.

-Bueno,ellos...–Tomé mis manos temblorosa.

-¡Por cierto!–Brincó en su lugar–Te daré un regalo–Sacó una cajita de sus bolsillos.

-Gracias Joshua,de verdad–Rascó su nuca y sus mejillas se tornaron rojas.

Dentro de la cajita roja con negro había dos dijes de dos corazones.
Al reverso de cada uno había una frase.

Uno decía:"Yo estaré para ti".
Y el otro:"Incluso cuando no quieras ni verme".

"Yo estaré para tí,incluso cuando no quieras ni verme".Las mejores palabras que he escuchado en toda mi patética vida.Sin dudas Joshua alegraba mi existencia.

-¡Gracias Joshua!–Lo abracé tan derrepente y tan fuerte que se sobresaltó.

-¿Gracias de qué?–Me abrazó de igual manera.

-Por entrar en mi vida y hacerme verla con un color diferente.
–El quedó helado por mis palabras.
Su cuerpo estaba tenso pero se relajó y me besó mi coronilla.

-Gracias a tí Hanna,por hacer de mis días algo más valioso–Un cosquilleo enorme acudió en mi estómago.Mis mejillas son tan rojas que creo que explotaré en cualquier momento.