Marcas.[Jihan][Seventeen]

3:Café

Jisoo contó hasta tres pacientemente,mientras el aire se instalaba pesado en su pecho.

Uno.

Sus ojos se entrecerraron al enfocar la mirada en las manos entrelazadas de su chico y Seungcheol.

Pidió calma,mirando el techo.

Dos.

Un sentimiento pesado se instalo en su estómago,con ganas de hacerlo rabiar.Sacudió la cabeza,insistente

Tres.

Su inseguro corazón se estrujó ante la deslumbrante sonrisa que su chico había dirigido a otra persona que no era él.

Gimió molesto,lastimado.

Pero pese a aquello trato con todas sus fuerzas en llevar su atención a otra cosa,en ignorarlos.

Él te ha escogido sobre otras personas.Ellos son solo amigos,debes aprender la diferencia, se dijo para apartar la neblina que inundaba su juicio.

No era correcto ser tan posesivo en una relación,lo sabía bien,y pese a ellos no podía evitar esos malditos celos que festejaban sacarlo de quicio.

Pero es que no podía evitarlo,era tan inseguro.¡Tenía tanto miedo de que alguien más robase el corazón de su Ángel!

Y por ello,ocultaba todas sus inseguridades en aquella la conducta de macho dominante.

Como un perro rabioso que defendía su territorio.

Hizo una mueca ante su propia comparación,se estaba yendo se tema.Y no,no fue nada linda la comparación.

Llamó la atención del mayor tocando su muñeca,cerrando sus dedos sobre esta pero sin ejercer ningún tipo de fuerza.

El Ángel se distrajo de su animada conversación y las miradas de los amantes chocaron llenas de sentimientos.

Con una pequeña reverencia se disculpó y siguió a Jisoo hasta la salida trasera.

El atardecer les dio la bienvenida,tendiéndolos de su luz naranja. El día estaba precioso,pese a la leve llovizna que no llegaba a mojar,pero ninguno de los jóvenes reparó en la belleza de un día con sol y lluvia.

Aún con la mano cerrada sobre la muñeca,alzó esta y depositó lentos besos en los nudillos de esta, uno por uno,con paciencia y detenimiento, observando lleno de felicidad el rubor en las mejillas del rubio.

Ah,¿Había dicho ya que nunca se cansaría de apreciarlo?Lo adoraba,era tan preciado, tan especial, tan cautivante.

Compartieron un par de besos;no tenían mucho tiempo,sin embargo,supieron aprovecharlo.

Y entre besos y sonrisas volvieron discretamente a su respectivos deberes.

-Hyung,¿Te sientes bien?-El maknae atento y veloz,se inclinó sobre el Ángel para inspeccionarlo.-Tus labios están muy rojos,también tu ropa esta húmeda¿No tendrás fiebre verdad?

Jisoo detuvo impulsivamente el avance de la  mano de Dino,que se dirigía al rostro de su chico,probablemente para comprobar su temperatura.

Se quedó en blanco ante la atónita y la curiosa mirada del Maknae y su pareja,respectivamente.
Su razón fue simple,Dino no tenía porque tocarlo.

Echó una rápida mirada a su chico.Estaba rojísimo,seguramente por haber sido pillado y miraba nerviosamente sus manos.Agradeció que ese mismo rubor serviría para hacerlo pasar de enfermo,aunque debía admitir que se veía precios-Ah, mente idiota,no era el momento.