[ML] La Coartada Perfecta【Gabrinette & Adrienette】©

Capitulo 1

El cuerpo de Gabriel Agreste, estaba en el suelo junto a la mesa del ordenador. Al cortarle el cuello mientras trabajaba, se desplomó de la silla y apenas se movió. No pudo arrastrarse hacia el teléfono para pedir ayuda. El estudio era grande y lujoso, como Gabriel uno de los diseñadores más reconocidos, quería mantener toda su mansión ordenada.

Muchos libros que estaban en la estantería era libros de diseños que el mismo hizo, unas cuantas fotografías familiares. El resto de las paredes estaba decorado por valiosos cuadros modernos, un árbol genealógico, títulos enmarcados y un recorte de periódico con el titular <<Condenado diseñador al copiar los diseños de Gabriel Agreste>>.

Su esposa, Marinette, abrió la puerta principal.

-Gabriel, cariño -llamó-. Ya he vuelto.

Le dijo al conductor del taxi que dejara su maleta en el recibidor y le pago. Luego cerró la puerta y, con el elegante abrigo azul puesto aún, fue hacia el estudio. Desde la puerta comprobó que el ordenador estaba encendido, pero, al principio, no vio a su marido. Cuando entró en la habitación lo encontró desplomado en el suelo. Dejó caer su bolso en el sillón y corrió a su lado. No necesito comprobar si tenía pulso. Cuando cogio su mano la sintió pesada y fría. Al volverse vio el cuchillo de la cocina debajo de la silla. Se tapó la cara con las manos y salió corriendo.

Marinette estaba sentada en el salón, destrozada y tensa, mientras el equipo encargado del escenario del crimen invadía el estudio. No tenía ganas de observarles realizar truculento trabajo, como buitres picoteando un cada ver.

El oficial de la policía estaba encargado del caso, el detective inspector Kim Chiến Lê era amigo de la familia. Es una impresión tremenda y una terrible pérdida. Era un buen hombre y un gran diseñador.

Kim Chiến Lê había conocido a Gabriel tres años atrás, cuando los dos se vieron involucrados en el mismo caso. Posteriormente, se trataron y el detective ya era amigo de la azabache ya que estudiaron juntos en la escuela. Ahora toco su brazo con suavidad.

-Me he hecho cargo personalmente de la investigación. Cogeré a quienquiera que lo haya hecho -Prometió Kim.

-Pero no me lo devolverá -Sollozo ella.

-No -murmuro el- Eso no puedo hacerlo.

Marinette sorbió y se limpió la cara con un pañuelo.

-Creo que tienes que hacerme preguntas.

-Si, por supuesto - contestó Kim comprensiva mente. Se aclaró la garganta, suspiro y empezó- ¿Cuándo regresaste y lo encontraste así?

-No lo sé exactamente.

-¿Cuánto tiempo crees que pasó?

-Una media hora aproximadamente.

-Está bien. Comprendo -dijo mirando su reloj para confirmar la hora.

Los ojos de Marinette estaban inflamados y el dolor erosionaba su elegancia y belleza natural. Se la veía demacrada y consternada.

-¿Dónde estabas? -Pregunto Kim

-Inglaterra. Acababa de volver.

-¿Negocios o placer? -pregunto.

-Un pequeño descanso, eso es todo. Gabriel tenía que haber venido también, pero le surgió un trabajo; como siempre. Ojala hubiera venido -murmuro Marinette.

-¿Cuánto tiempo estuviste allí?

Marinette lo miro con recelo.

-Tengo que preguntártelo -le explico el- para determinar la hora d su muerte. Eso es todo. Es de suponer que estaba bien cuando te fuiste. Entre entonces y ahora...